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Jungkook saludó a su padre primero nada más entrar a casa, siendo después saludado animadamente por su novio. El menor se dirigió hasta su habitación, pero Jimin no le había seguido, se había quedado hablando con su padre. A Jungkook no le pareció raro y nada más llegar a la habitación, se tumbó boca abajo en la cama, cansado de todo. De que le doliera la mejilla, la nuca y el alma. ¿Cómo podría volver a reconstruirse?

(...)

Mientras, abajo.

-Necesito tener la casa sola con Jungkook, es que le estoy preparando una sorpresa... ¿Podría por favor ir a dar una vuelta y regresar por la noche?- Preguntó Jimin al padre de Jungkook.

El hombre no vio problema, quería ver a su hijo feliz, por lo que asintió alegremente y se marchó de casa.

Bien.

(...)

Jimin entró a la habitación minutos después, encontrándose a Jungkook tirado en la cama. Perfecto.

Con sigilo fue a colocarse encima del menor, el cual se llevó un enorme susto al sentir el calor de alguien encima.

-¿Q-Qué haces?- Preguntó Jungkook confundido por aquel gesto del mayor.

-Solo espera- Susurró Jimin sentándose encima de su novio para verle la espalda al completo.

Era un palo, estaba delgado, pero tampoco estaba tan mal. Jimin comenzó a hacerle caricias desde su nuca dañada hasta su espalda baja. Jungkook se mantenía en silencio, expectante, no sabía lo que estaba ocurriendo.

-Hablé con Jin hyung- Comenzó a contar Jimin mientras que sus manos seguían bajando hasta estar en el límite de la camisa del uniforme de su novio.

-Me dijo que quizás podías ser bueno para algo en tu miserable vida- Dijo Jimin riendo, saliendo de encima de Jungkook, el cual tenía una cara de confusión extrema.

Jimin hizo que Jungkook se sentara en la esquina de la cama, sentándose él al lado, tocándole un hombro.

-Quizás puedas ser bueno para darme placer- Concluyó Jimin con una sonrisa perversa, mientras deslizaba su mano hasta el cuello de la camisa de su novio, bajando hasta desabotonar el primer botón.

Jungkook creía haber escuchado mal. ¿De qué estaba hablando? ¿Darle placer? No. No no no. Intentó detener la mano de Jimin, pero este le agarró la muñeca con la otra mano y negó con la cabeza.

-No te vas a escapar, bobo- Dijo Jimin riendo al ver las intenciones de su novio de detenerlo.

Jungkook volvió a sentir miedo. Siquiera se besaban. ¿Cómo iba a permitir eso? No, ni de lejos. Y menos su primera vez... Mierda. Su primera vez.

-No te preocupes, soy todo un experto- Rio Jimin desabotonando todos los botones de la camisa del uniforme de Jungkook.

El menor sintió sus mejillas encenderse al sentir el aire en su torso, una vez Jimin le había quitado la camisa completamente. Y no, no se habían encendido de vergüenza. Estaba aguantando las ganas de echarse a llorar. Estaba demasiado aterrado. No podía hablar, no podía detenerlo.

-Buen chico, no te muevas- Dijo Jimin con una voz más grave de lo normal.

El mayor acostó a su novio sobre la cama de nuevo, tumbándose encima, pero esta vez, Jungkook estaba boca arriba y Jimin sujetándole ambas muñecas por encima de su cabeza.

-No estás mal para lo que eres- Comentó Jimin el torso desnudo de su novio.

Jungkook apretó los ojos cuando sintió a Jimin comenzar a besarle el cuello. Le estaba repugnando demasiado aquella situación. Le daba asco y miedo. Quería salir corriendo. Quería empujar a Jimin y escaparse del país, o que la tierra le tragara.

Cielo estrellado ~ VKookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora