11.

20 1 0
                                    




Jungkook después de todo aquello se había quedado profundamente dormido. El encontrarse tan adolorido, el no querer moverse, el cerrar los ojos deseando que su existencia se acabara, le hizo adormilarse de tal modo, que no se enteró cuando Jimin regresó a casa, ni cuando su padre le llamó para cenar, ni cuando su novio fue a su habitación para dormir junto a él y sonreír al ver cómo de adolorido parecía estar el contrario.

(...)

A la mañana siguiente, Taehyung se despertó como siempre, con sueño, pero feliz, por mensajes de buenos días de su novio y por el saber que tenía escuela. Aunque levantarse temprano no era lo que más le apetecía en el mundo. Por lo menos le consoló el saber que era el último día de la semana, que después del fin de semana llegarían los exámenes finales y serían libres, vacaciones de verano. Podría pasar todavía más tiempo con su novio, con su familia...

Cuando acabó de tomar su desayuno en completa calma, se dirigió a la escuela. Hasta que se acordó de Jungkook. Ese niño le tenía más preocupado de lo que nunca antes se había preocupado por un amigo. Parecía como un instinto... ¿paternal? No sabía, pero Jungkook parecía haberle mentido en el mensaje del día anterior. Probablemente como siempre. Estaba seguro de que no se encontraba bien.

(...)

Jungkook fue el último en levantarse de toda su casa. Había tardado más de lo habitual por obvias razones. Su cuerpo dolía incluso más que el día anterior. No se podía prácticamente ni mover, por lo que iba a trompicones, sujetándose a cada pared que veía, o a cada objeto.

-¿Te caíste de la cama?- Bromeó su padre una vez Jungkook llegó junto a donde se encontraban desayunando él y su novio.

Jimin rio levemente, le agradaba demasiado el padre de su pareja.

-Mmm... Sí- Mintió Jungkook sentándose con mucha dificultad en la silla, para mirar la comida que había ya en la mesa. Tostadas, leche, zumo... No tenía hambre. Se quedó en esa posición, sin probar bocado.

-Jungkook, ¿no desayunas?- Preguntó Jimin en un tono amigable, muy extraño para el menor.

El nombrado negó con la cabeza excusándose de nuevo diciendo que no tenía hambre.

-Pero ayer no has cenado, estabas demasiado dormido- Comentó su padre preocupándose de la falta de alimento en su hijo.

Jungkook solamente se encogió de hombros, y para no aguantar más ni a su novio ni a su padre, agarró su mochila en la esquina de la estancia y se fue a sentar en la puerta para esperar a su novio e irse juntos a la escuela.

Jimin tardó unos pocos minutos en llegar a donde estaba Jungkook, para hacerle levantar con un movimiento de cabeza. Se despidieron del padre del menor y caminaron, como siempre, en silencio a las escuela.

Y la misma rutina ocurrió.

Excepto por algo para Taehyung.

HORAS DESPUÉS...

Estaba sonando el timbre que indicaba que la penúltima clase del día antes del fin de semana había acabado. Taehyung salió feliz de su clase de Plástica, como siempre. Su última clase sería Lengua. Se dirigió hasta su clase con todo el resto de sus compañeros y se encontró a su novio en los pasillos con los de su aula.

-Hola TaeTae- Dijo su novio alegre acercándose a él para saludarle.

Taehyung no pudo hacer otra cosa que sonreír al escuchar su voz. Le producía un sentimiento de paz y tranquilidad, que ninguna otra persona fue capaz de transmitirle nunca.

-Hola Hobi- Murmuró Taehyung dedicándole una enorme sonrisa a su pareja, la cual se enamoraba más cada vez que miraba la peculiar sonrisa de su novio, la que, por desgracia, era muy criticada por otras personas.

Cielo estrellado ~ VKookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora