El primer día...

204 15 13
                                    

Me desperté temprano, con el primer rayo de luz de la mañana que entraba por la ventana. Estaba tumbada en el sofá de la sala común. Miré alrededor y encontré a Remus de pie junto a la ventana mirando por ella. Me levanté y me acerqué.

-Buenos días- le saludé. Se sobresaltó y dio un respingo antes de girarse y mirarme.

-Buenos días. ¿Has dormido bien?

-Si. Pero creo que subiré a cambiarme y coger mis cosas. Y puede que de paso conozca a mis compañeras de cuarto.

Me despedí de él y subí las escaleras hasta que me detuve en una puerta que tenía una placa con mi nombre y el de otras chicas. Entré y encontré cuatro camas. Tres con chicas dormidas y una con mi baúl a los pies. Mi cama estaba en el otro extremo de la habitación, cosa que agradecí, pero que en ese momento no me ayudaba demasiado. Intenté no hacer ruido mientras iba hacia la cama, pero tropecé con algo y me caí. No me hice mucho daño, pero si que me quejé y maldije un baúl con las iniciales L.E. que estaba en medio de la habitación.

-¿Quién eres?- me preguntó una pelirroja que se despertó sobresaltada.

-Soy Sandra Black. Al parecer soy vuestra compañera de cuarto.

-Haberlo dicho antes- comentó una morena sentada en su cama. -Soy Alice.

-Yo soy Cristina- se presentó una rubia también desde su cama.

-Y yo Lily-. Era la pelirroja. -Perdón por el baúl- se disculpó.

-No te preocupes- dije levantándome y frotándome la nuca.

-¿Cómo es que no estabas ayer?- me preguntó Alice.

-Me entretuve.

-¿Cómo?- inquirió Lily.

-Con un amigo.

-¿Quién?- me interrogó Cristina.

-¿Vais a seguir interrogándome o vamos a prepararnos para ir a clase?- pregunté abriendo mi baúl y sacando la túnica y los libros que metía en la mochila.

No contestó nadie. En lugar de eso se levantaron, cambiaron, peinaron y cogieron los libros. Cuando salimos de la habitación, descubrimos que las escaleras se habían convertido en un tobogán.

-Bajad vosotras primero- les comenté.

Así lo hicieron. Bajaron por el tobogán como un grupo de niñas pequeñas. Cuando las perdí de vista, negué con la cabeza y las seguí. Cuando llegué abajo encontré a Remus sentado en un sillón leyendo y a un chico bajito y regordete al lado de James que ayudaba a mi hermano a levantarse.

-¿Qué has hecho ahora?- le pregunté acusadoramente.

-Nada.

Me crucé de brazos y le miré fijamente. Ese truco siempre funcionaba para que me dijera lo que quería saber.

-Está bien...- desistió. -He intentado subir a buscarte y en cuanto he pisado el primer escalón, las escaleras se han convertido en ese tobogán y me he caído.

-Eso te pasa por tonto- le pinchó James.

-Eso te pasa por no saber normas de seguridad básicas del castillo- informó Remus sin apartar la vista del libro.

-¿Como cuales?- preguntó mi hermano desconcertado.

-Como esta- dije señalando las escaleras. -Ningún chico puede subir las escaleras de los cuartos de las chicas.

-¿Cómo sabes eso?

-A diferencia de ti, yo me he pasado estas semanas en la biblioteca leyendo sobre Hogwarts- expliqué con superioridad. -Además, le pregunté a mamá.

Mi licántropo.💗🐺 Problema: mi hermano.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora