Beginning {N.2}

Capitulo 6

No voy a desaprovechar esta oportunidad, no sé si es el destino o simple casualidad, pero no la dejare ir, tengo todo planeado. Bebemos y bebemos, ya esta mas que borracha. Si lo sé, soy el imbécil más grande del mundo por estar emborrachando a la tipa que me quiero llevar a la cama, pero sé que si estuviera consiente ella no se iría conmigo. La deseo tanto. Quisiera hacerla mía aquí mismo pero no puedo arriesgarme a que tiren fotos o me graben, tengo una reputación que cuidar.

-chicos, ya nos vamos- le digo a mis amigos.

-se que te divertirás mucho esta noche- comenta Alec.

-es toda una delicia- sigue Matt- quizás quieres compartirla después- giña el ojo. Sé que aunque fue una broma, me cabreo muchísimo.

-bueno, ustedes se quedan?

-no, te acompañamos al estacionamiento- le pagamos a la camarera y salimos del establecimiento. Escucho que alguien la llama, giro y es un chico, creo que trabaja con ella, lo e visto en el restaurante.

-Zoe, que haces?- pregunta al acercarse, Alec lo empuja- cual es tu problema?

-quien eres?- le pregunta este.

-vengo con ella- responde, a lo que yo , ágilmente, la cargo y la deposito en el auto, mientras el chico grita su nombre. Matt y Alec lo sostienen hasta que enciendo el motor y me marcho.

Bien hecho David, eres un fugitivo de la ley, le acabas de robar la novia a alguien, solo por complacer un estúpido capricho sexual y que capricho, miro por el retrovisor el asiento de atrás, cerciorándome de que ella está bien y de que alguien no nos siga.

Estaciono frente al hotel, bajo del coche y le entrego las llaves al chico del parqueo, ayudo a Zoé a bajar, mientras esta se desmaya en mis brazos. La cargo hasta los ascensores para ir directo al cuarto que reservé. La dejo en la cama mientras voy por algo de agua.

Al volver, se mira tan deliciosa, acostada en la cama, le quito el bello vestido, los zapatos, mientras voy dejando pequeños besos por todo su bello cuerpi, tiene una piel extremadamente blanca, suave como terciopelo, huele exquisito.

-te va a encantar princesa- mmm, y si que me gustara a mi.

Me desvisto, a lo que ella se acomoda en la cama, se mira tan exquisita provocando en mi mas excitación, sus pechos redondos, se mueven al tratar de acomodarse, oh por el cielo!! No soporto mas y me coloco sobre ella, acariciando todo lo que puedo, delineando cada curva de ella, me coloco entre sus piernas, masajeo su feminidad, preparándola para recibirme, esta tiembla ante mi delicado toque, escapando de sus carnosos labios, débiles gemidos provocando que mi amigo se ponga más duro.

Cuando ya no soporto mas, me introduzco en ella, provocando un grito que me exita mas y mas, mientras voy entrando en ella. Me muevo cada vez más rápido mientras ella sigue mi ritmo.

-vamos nena, dame mas- aumento las embestidas, hasta que llega mi liberación... trato de regularizar mi respiración, porque este es el primero de muchos que tendré toda la noche, porque la tengo para mi y no desaprovechar esta oportunidad...

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Escucho la alarma de un teléfono sonar, no es el mío porque está apagado, seguro es el de ella, sigo con los ojos cerrados mientras ciento como se acomoda en mi pecho, provocando que suelte un gruñido, esta al escucharme me mira de arriba abajo, analizándome como si fuera lo mejor que avisto en su vida, pues claro, de seguro soy el mejor hombre con el que ha estado, en mucho tiempo, porque estaba malditamente estrecha, se notaba que no era virgen pero sí que había pasado mucho desde su ultima relación sexual. He estado con tantas mujeres que me he vuelto un experto.

-disfrutando de la vista- comento seductor- al parecer, durmió bien Srta. Brown.

-igual que usted- se levanta furiosa- ya obtuvo lo que quería verdad- camina por toda la habitación buscando sus cosas.

-no del todo, espero que se vuelva a repetir.

-cree que soy una cualquiera?- pregunta molesta

-conozco a las mujeres de su tipo, Srta. Brown- me acomodo mejor en la cama- se comportan como mujeres difíciles, recatadas, que no rompen un plato. Ayer quedo más que claro que es una mujer fácil, 2 o 3 tragos gratis y caen rendidas.

-se equivoca conmigo- me interrumpe.

-nunca lo hago, si necesita dinero, solo debe pedirlo, claro que a cambio de algunos favores, puede conseguir más conmigo.

-dejare bien en claro una cosa Sr. Robets, usted no es quien para juzgarme, ni decir estupideces sobre mi sin conocerme- se acerco a mi ya vestida- es un imbécil, puede meterse su dinero por el culo- me golpeo y sale caminando de la habitación con el resto de sus cosas.

Esa maldita si pega fuerte, pero nada que el hielo no mejore. Joder, esto no se quedara así. Tomo mi teléfono y lo enciendo, cuando está completamente encendido, marco su número

-Buenas...- contesta al instante

-pagara por su descaro, Srta Brown...- me corta

-váyase a la mierda- cuelga.

A mí, quien se cree que es para colgarme. Marco otro número y contestan al instante.

-te daré instrucciones y espero que hagas todo como yo te diga, está claro...