Las buenas historias existen, por eso son historias. Por qué alguna vez fueron contadas o vividas ya sea por un personaje o por el hecho de sentirlas. No sabemos si son reales, para mi lo son, son tan reales que me hacen llorar: me hacen sentir mal, me hacen enojar, reí, gritar...soñar. Pero sobre todo...imaginar...
Inspiración de la escritora...
Joaquín
-papas...les tengo que d-decir algo... -mire a mis papas, estaban sentados en el sillón mirándome preocupados, mis nervios me traicionaron. A pesar de que ya lo había hablado con Ren no estoy seguro, pero quiero hacerlo, tengo que hacerlo...para ser libre.
- ¿qué pasa hijo?, no nos preocupes. -hablo mi madre.
-mamá...papá... -mire mis manos, mi pulso estaba al cien.
- ¡antes! -interrumpió Ren tomándome de los hombros. -deben comprender y saber, que Joaco no está haciendo nada malo...sólo...quiere ser feliz.
-no entendemos hijo...-hablo mi padre tomando la mano de mi madre.
-bueno. -respire hondo. -yo, yo...s-soy...gay. -cerré mis ojos, mis lágrimas brotaron no escuche nada, sólo sentía el agarre de Ren.
Sentí los brazos de alguien más, mis nervios se esfumaron y mis esperanzas crecieron.
-hijo...te amo y nada va hacer que cambie de opinión. -abrí mis ojos al escuchar a mi madre, tenía los ojos llenos de lagrimas.
-gracias mama. -Me aferre a ella.
-hijo...-mire a mi padre que aparto a mi madre. -te apoyo. -sonreír ligero, a pesar de que tiene una sonrisa, no la veía sincera.
-se...que no es f-fácil de creer. -los mire. -pero estoy seguro y no saben lo feliz que me hacen. -mis lágrimas brotaron.
Los abracé como nunca, pensar que mis papas me apoyaban era...simplemente perfecto
Todo se tornó oscuro y extraño, comencé a escuchar gritos, y como un carro se estampaba, intente abrir mis ojos pero todo era oscuro, una pequeña luz a lo lejos llamó mi atención, ¿dónde estoy?, mire mis manos tenía sangre por todos lados, mi pulso se empezó a alterar.
- ¡cuidado! -la luz se hizo tan intensa, aquella voz se escuchaba desgarradora, mis ojos se inundaron al instante, ¿¡qué está pasando!? me hinque asiéndome volita, no dejaba de escuchar gritos y ambulancia.
- ¡ya déjame! -
Todo se tornó silencioso, poco a poco abrí mis ojos, me encontraba en casa, recorrí el jardín con la mirada.
-Joaquín, si viniste. -mire a mi padre, se acercó tomando mi rostro.
-papa... - ¿porque estoy llorando?
-hijo, te dije que si no lo dejabas por la buenas, lo dejabas por las malas. -mi pulso se aceleró, por alguna razón tenía miedo.
-papa...n-no. –negué.
Mire a mi padre con miedo, sostenía una correa enrollándola en su mano. Sentí el primer golpe y mi cuerpo se estampó contra el suelo. Quemaba el dolor quemaba, sentía mis lágrimas en todo mi rostro. Sentí uno, dos, deje de contar cuando el dolor se hacía más intenso.
- ¡no llores, entiende que eso lo hacen la niñas! –grito.
- ¡niña!, eres una niña, una aberración. -me pateaban de un momento a otro los de mi escuela."
ESTÁS LEYENDO
Notas del destino (Emiliaco) #Wattys2019
DragosteJoaquín Dicen que siempre es bueno aceptar las cosas como son en realidad pero quien quita que uno no sabe cual es su realidad, uno aveces sólo pienza en como desvanecer el dolor de prejuicios y problemas que uno tiene que enfrentar sólo, pero para...