Narra Melody
Estábamos con Ross en la cocina. Esperando a que los chicos vuelvan. Mientras, cocinábamos. Y por cocinar me refiero a abrir latas que están en "buen estado". Oh, vamos, con suerte has abierto 2 latas. Te la pasas mirándolo. Mi subconsciente me regaña. Odio que tenga razón.
Con Ross hablábamos de nuestras vidas antes del apocalipsis.
- Así que eres hija única ? - Dijo él sacándome de mis pensamientos.
- Así es - Respondí. Con calma me subí a la mesada de un salto. Coloqué la lata que estaba abriendo detrás de mí, sin importancia.
- Déjame terminarla - Dijo refiriéndose a mi lata. Se acerco a mí lentamente, lo notaba un poco nervioso. Sin querer, su mano rozó mi cintura al querer pasar por detrás de mí. Una electricidad me recorrió todo el cuerpo, instalándose en mis mejillas. Ross comenzó a acercarse a mis labios con la simple excusa de la lata. La mano destinada a la lata fue a parar a mi cintura. Nos mirábamos fijamente. Almendra contra verde. Sus ojos eran hermosos. Estábamos a centímetros de besarnos. En mi estomago un millón de sensaciones se hacían presentes. Con los ojos cerrados, coloque mi mano derecha en su hombro, haciendo así que deje de avanzar. Volví a dejarlo con las ganas.
- Que es esa manía tuya de querer besarme ? - Dije con una sonrisa divertida y ojos juguetones mientras mi mano hacía un suave recorrido desde su hombro, por el cuello, la mejilla y finalmente en su mentón. A mí se me hubiese erizado la piel con el contacto de su tacto con el mío.
- Creo que cualquiera que te vea tendría el mismo problema que yo. - Dijo acercándose un poco más, con la misma sonrisa que yo. Dejé salir una pequeña risa que lo dejó delirando. Me di media vuelta sobre mi misma y tome la lata.
- Creo que esto es lo que buscabas. - Dije agitándola con una media sonrisa.
- No precisamente, pero la tomaré. - Dijo tomándola y dándose vuelta. Eso me dejo shockeada. Realmente quiere que algo ocurra entre nosotros ?
- Hey, sabes qué ocurrió con Alex ? La veo muy deprimida. - Dije mirando por la pequeña ventanita que estaba a mi derecha. Del otro lado se encontraba Alex, notablemente extraña. Jugaba peligrosamente con su arma blanca.
- Lo que ocurrió es que Alex trató de excavar en el pasado de Justin, como precisamente le dije que no hiciera. - Dijo un poco molesto. Descargaba un poco de su energía en abrir la lata. Yo lo ayudaría a descargar esa energía... dijo mi pervertido subconsciente. Eso fue una cachetada mental para él. Auch, se quejo. Se lo merece por mal pensado.
Miré con pena a mi mejor amiga, apartando mis tontos pensamientos. Ella estaba muy pensativa, pero principalmente enojada. Me levanté para ir a intercambiar palabras con ella.
- Puedes con eso ? - Le dije a Ross.
- Si, no hay problema. - Dijo sonriéndome. Respondí con una sonrisa de agradecimiento y me fui por la puerta.
Caminé hasta donde se encontraba ella. Me senté a su lado y me miro de reojo, con una seriedad digna de un muerto.
- Como estás ?- Pregunte delicadamente y con una sonrisa.
- Como te parece ? - Respondió brusca. Su respuesta me sorprendió. - Lo lamento, es que estoy muy enfadada. - Me dijo arrepentida.
- Ya veo - Dije obvia. - A qué se debe tu humor ? - Pregunte curiosa, aunque ya dudaba por qué.
- Justin no me trató como merezco. - Dijo entre afligida y enojada.
- Quieres que lo haga entrar en razón ? - Dije furiosa sacando mi cuchilla y clavándola en la oscura mesa de madera. Nadie le hace mal a Alex y sobrevive para contarlo.
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Zombies: Viviendo el infierno (PAUSADA)
ParanormalLa escalofriante historia de dos amigas intentando sobrevivir en un mundo de muerte.