Love Harmful 2: Buscando el amor.

#33. No mires atrás, sigueme a mi.

El amor es una amistad con momentos eróticos. ─Antonio Gala.

Me quedo sentada en la cama esperando por Harry. No veo nada interesante en la habitación y me dispongo a observar el techo. Tras varios minutos, la puerta se abre y entra Harry en unos jeans y con el pecho desnudo. El me sonríe de medio lado y camina hacia mi, inclinándose y dándome un fugaz beso.

─ ¿Que planes tienes para hoy? ─me pregunta Harry colocándose una camisa blanca.

─No lo se, ninguno. ¿Tu si?

Harry se encoge de hombros y se deja caer a mi lado.

─Nope, ninguno. Pero puede ser que este ideando uno en mi mente macabra ─dice con voz "horripilante".

─A ver, a ver, ¿que ideas en esa cabecita?

Harry se lleva un dedo a la barbilla y da varios golpes en esta.

─Ya se, ¿por qué no me besas? ─dice Harry con una sonrisa pícara.

─ ¿Besarte? ─repito y el asiente─. Pero eso no era lo que tenia en mente.

Harry alza una ceja.

─Entonces, ¿que tenias en mente exactamente? ─sonríe otra vez, pícaramente.

─No te emociones, no es nada pervertido si es lo que esperabas ─digo naturalmente aunque creo que acabo de adquirir color en las mejillas.

─Diablos, tenia los dedos cruzados para que fuera algo como eso ─chilla Harry tirándose de espaldas sobre la cama─. Pero bueno, dime que es.

─Quería que fuéramos a dar un paseo ─digo haciendo puchero.

Harry pone los ojos en blanco y hago lo mismo como respuesta.

─O podemos ir a nadar ─sugiere Harry.

─ ¿Nadar? ¿A donde?

─Si no me equivoco hay un río o lago cerca, aunque bueno, se supone que no entremos pero, ¿de cuando acá a mi me importa eso?

─Eso suena perfecto.

─Espera ─me interrumpe Harry─. ¿Escuchaste la parte donde dije que no debemos nadar ahí?

─Si, ¿que con eso?

─Pensé que quizás no estarías de acuerdo, porque ya sabes, se supone que es restringido.

─Al diablo con eso ─digo camino a la puerta─. ¿Vamos o no?

Harry luce sorprendido, pero se ríe y me sigue fuera de la puerta.

Nos montamos en el Jeep, y prácticamente no decimos mucho en el trayecto, aunque eso no me hace sentir apenada ni nada. Veo como Harry se desvia de la carretera y entra en un sendero entre el bosque.

─ ¿Seguro que es una buena idea? ─le pregunto un poco nerviosa.

─Tu dijiste hace un rato "al diablo con eso, ¿vamos o no? ─me imitó Harry con voz chillona haciéndome reír─, ¿y ahora estas arrepentida?

─Bueno, no es que este arrepentida, es solo que... Nada, nada, olvídalo, vamos.

Harry sonríe y sigue gustosamente manejando a través de los arboles que rodean este sendero. Finalmente, se parquea en un extremo al lado de un gran árbol. Bajo del carro al igual que el, mira a mi alrededor pero no veo nada de agua en el perímetro. ¿Tan adentrado esta?

─Vamos, por aquí ─dice Harry sujetando mi mano.

Al contacto, siento mi cuerpo estremecerse de pies a cabeza. El me mira a los ojos y se inclina y me besa de forma rápida en los labios. Me jala por el sendero y caminamos como por diez minutos, hasta que veo por fin el agua. Y no es un río, es un lago.