Love Harmful 2: Buscando el amor.

#39. Un día común.

Harry y yo nos bajamos dando un pequeño salto. Entrelazamos nuestras manos y nos dirigimos a la entrada de la escuela. Dios mío, volver a la escuela no me alegra para nada. Me preparo para la hilera de comentarios que se alzaran entre nosotros.

-No te preocupes, sabes que siempre han hablado. Hoy no será la excepción -me dice Harry dándole un pequeño apretón a mi mano.

-Lo se, pero ya sabes, siempre he odiado ser el centro de atención -respondo encogiéndome de hombros simplemente.

Al cruzar el umbral de la puerta, las miradas se posan en nosotros dos. Mi nombre y el de Harry caen en mis oídos y volteo los ojos, y Harry ríe ante mi expresión.

-Vamos Jadey, no te mortifiques desde tan temprano. Ni si quiera son las ocho de la mañana -dice Harry estrechándome contra su pecho.

-Tienes toda la razón. ¿Para qué mortificarme? -digo decidida a ignorar a la gente.

-Esa es la actitud.

Observo con atención, y veo ondular a lo lejos un cabello color rosado. Aquí vamos de nuevo.

-Jack no bromeaba al decir lo que dijo de ella. ¿Enserio cree que le va bien ese cabello? -digo de manera inevitable.

Creo que una vez que una persona te desagrada, lo hará para siempre. ¿Pero que mas puedo hacer?

-Siento que las cosas aquí no cambian -dice Harry felizmente, ignorando el hecho de que Brittany esta parada frente a nosotros.

Ella se aclara la garganta, y alzo la mirada para verla moviendo el pelo de manera teatral. Ugh.

-Hola, chicos -dice Brittany, su mirada en nuestras manos entrelazadas-. Pensé que no volvería a saber de ustedes mas. Ya saben, como desaparecieron de la noche a la mañana.

-Y nosotros teníamos la esperanza de no verte tan temprano en la mañana -digo.

A diferencia de antes, ella solo pone un falsa sonrisa y respira profundo. ¿Controlándose? No me sorprende.

-Como sea, ahí se ven.

Dicho eso, Brittany se marcha.

-Bueno, pudo ser peor -digo, y el timbre suena.

-No puedo creer que estemos de vuelta a la escuela, y que tengamos que estar separados nuevamente -Harry dice haciendo puchero.

-Lo se, pero solo serán unas horas tonto.

-Pero hoy es lunes, y el jueves empezaras a empacar para volver a tu casa, ¡ahora si estaremos separados, Jadey!

Ahí tiene razón, pero ¿que se supone que hagamos? No hay nada que hacer dado que ninguno de los dos somos mayor de edad, ademas, no es como si estuviéramos casados. Así que como sea, es extraño vivir en la misma casa que tu novio. Sonreí en su dirección.

-Ya, solo procura llegar a clases y reponer todo. Estamos atrasados y eso no es bueno, no quiero ser senior otro año mas.

Harry me abrazó, enterrando su nariz en mi cuello.

-Esta bien, Jade. Pareces mi mamá.

-Si no te mando aquí o allá, ¿como lograre que hagas las cosas que debes hacer? -pregunté.

Harry suspiró, volteando los ojos.

-Esta bien. Nos vemos en la hora de almuerzo.

Con eso, se alejó caminando en dirección a su salón. Yo hice lo mismo, y cuando llegue al mío Lorena casi me mata.