El dolor que continuó a esa frase, es algo que ya había sentido en mayor escala. Hace muchos años atrás, en una loca travesía hacia el Cairo, Egipto, había vivido el mayor dolor de mi vida, era una cosa sorda, que no te dejaba respirar, un huracán que te arrastraba y no te dejaba salir. El ver el cuerpo de la persona que amas roto, desangrándose y sin vida, era la peor experiencia que alguien podía vivir, más aún si nunca llegaste a decirle cuánto lo amabas por miedo y cobardía. La vida me dejó atrás después de eso, y ahora que sentía que al final podría salir de aquella tormenta, siento que en realidad me encuentro en el ojo de ella. Aún más jodido que antes.
Después de decirle la verdad a Josuke, pude ver cómo algo dentro de él hacía clic y se rompía. Pude ver, segundo a segundo sus emociones a flor de piel. Incredulidad, tristeza, desilusión, y después ira, rabia y... Asco.
Asco.
-¡Aléjate de mi! -vociferó- ¡Aléjate, aléjate!
Se paró y vi como se agarraba la cabeza dándome la espalda, parecía que era mucho para el todo lo que tenía que procesar y entendía que fue un gran error llevarlo lejos de su casa.
-Puedo llevarte a tu casa si quieres
-Sólo déjame pensar, quiero pensar -Me respondió entre lágrimas- ¿Porqué? ¿Porqué me besaste sabiendo eso? -se dio vuelta y me agarró del cuello de mi polera- ¡¿Porque hiciste eso conmigo sabiendo todo esto?!
Excelente pregunta niño. Excelente pregunta. Sabía que al rendirme a lo que sentía, era una forma de despedirme de cualquier esperanza de felicidad. Quería, por una vez en la vida, realizar lo que nunca tuve valor de hacer. Con él, no lo hice y después no hubo tiempo ni oportunidad. Yo sabía que la perra vida me estaba dando una oportunidad más, pero al mismo tiempo me la arrebataba de un segundo.
-Simplemente quería darte algo que nunca más podré dar. Se acabó para mí.
Con eso, el me soltó y lágrimas gruesas y dolorosas comenzaron a brotar de sus ojos. Lágrimas que delataban cuan afectando estaba, pero al menos, sabía que si en algún momento el había albergado algún sentimiento por mi, no se iba a quedar con la frustración de nunca haber cumplido o sentido algo. Es lo único que podía hacer para que él no entrara en el karma que sentía que revivía una y otra vez en mi vida. Era egoísta de mi parte, porque también fue por mi, pero creo que fue la mejor forma de actuar para esta situación.
-Te traje aquí porque el mar es una fuente de cura natural para el ser humano, es basto e infinito y en él la vida difícil e improbable, es posible. Por eso dedico mi vida a las criaturas que habitan en el... -tragué saliva, eso no venía al caso- Creo, que lo menos que te debo es la posibilidad de aliviar tu corazón. Tienes muchas cosas que pensar y aquí, es el mejor lugar para hacerlo. Te dejo en paz y cuando quieras que te lleve a casa, solo dímelo.
Lo dejé ahí, clavado en el muelle y yo me fui derecho al auto. Me cubrí el rostro con las manos y me quedé apoyado contra el volante, no podía más.
.........
Habían pasado dos semanas desde aquel día en que perdí las esperanzas de cualquier cosa con Jotaro. Después de que lloré y destruí el muelle por completo, Jotaro no me dijo nada y simplemente me espero. Parecía que era cierto que se había acabado para el. Cuando acabó mi berrinche, me llevo a casa y hablo con mi mamá y mi abuelo que estaba ahí también. Yo solo quería morirme y mi mamá parecía entenderme, porque disimuladamente terminó la reunión "familiar" en un santiamén.
Después de eso, simplente lloré por varios días y tuve que inventar una excusa a mi mamá para no angustiarla de más. Para ella, yo estaba deprimido por enterarme que mi papá no había venido a verme en persona a pesar de saber que yo existía. Realmente no pudo importarme menos, el tipo no se preocupó por mí en toda la vida (aunque parece que no sabía nada igual) y ahora que sabía de mi, mucho menos. No lo necesitaba, pero era la excusa perfecta para poder dejar que mi alma en pena este en la superficie y no tener que fingir.
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Why you [JotaJosu Jojo novel]
Genç KurguMi nombre es Josuke Higashikata, y soy un usuario de Stand. Tengo 16 años y mi vida, aunque común y aburrida por fuera, por dentro está llena de cosas que aún no entiendo. Y que no quiero entender. Yo soy Jotaro Kujo y aunque no busco, ni quiero ni...