GAMER

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Fue una mañana con un cielo nublado, la voz de Albert se escuchaba entre ansioso y miedoso, sabía que las cosas no estaban bien, algo había pasado y sabia que si Albert me había llamado era por algo relacionado con Fabricio.

-que pasa Albert? Deja de darle tantas vueltas y habla de una vez...que pasa con Fabricio?- la curiosidad me mataba y por un momento la idea de que nuevamente Fabricio se haya intentado suicidar hacia que se me formara en el vientre un nudo horrible, una opresión insoportable se posaba en mi espalda y tuve que sostenerme de algo para evitar un accidente.

-mira Luna- suspiro- Fabricio tuvo un accidente y al parecer esta en riesgo de...de...- Albert comenzó a sollozar, ni él ni yo estábamos preparados para pronunciar aquella palabra con mucho peso, no estábamos listos para soportar que Fabricio se marche para siempre.

-Albert estas seguro? Pero cómo paso? Si apenas vi ayer a Fabricio y...estaba bien-

Esa era una cruel mentira, yo sabía que ayer en la noche le había hecho mucho daño a Fabricio, sabía que se había marchado de mi casa muy molesto y deprimido, quizás después de todo no haya sido un accidente...quizás todo fue mi culpa...si él se va no se como podría vivir con ese dolor...Fabricio se pondrá bien Luna, sólo es cuestión de tiempo, él no morirá, él no seria capaz de dejarnos de esta manera...

-Luna sigues ahí?-

- aquí estoy...-

-te decía que según Fabricio iba hasta a su casa pero al parecer un hombre demasiado alcoholizado se paso un alto y pues...choco con él-

-y cómo están sus padres- cómo si en realidad eso te importara Luna

-pues ya te imaginas, devastados... Temen lo peor para su hijo menor-

-me imagino-

(....)

Después de la llamada de Albert me senté por un momento en la orilla de mi cama y empecé a pensar en qué demonios hice el día anterior. Sé que había lastimado demasiado a Fabricio pero creí que era lo mejor que podía hacer por él.

Sabía que tenia que quitarlo de una u otra manera, por eso cuando se encontró con la prueba de embarazo de Ana no tuve más remedio que decir que era mía. Fabricio parecía quedarse completamente pálido, su mirada mostraba por un momento una leve esperanza, sabia que lo primero que pensaría era que la criatura 'que estaba esperando' era de él, pero en ese instante metí a Char diciendo que en realidad él era el padre de mi futuro hijo. Sus ojos parecieron quemarse por dentro por el coraje y la furia pero eso no importaba, por fin Fabricio iba a ser libre para irse con Mabel o con cualquiera que él quisiese sin sentir remordimientos.

Quizás después de todo Fabricio choco a propósito o en verdad el hombre ebrio tuvo la culpa, si es que existió algún hombre.

Trate de calmar mis nervios para evitar un ataque que amenazaba con quitarme la tranquilidad, pero aquello era imposible. Lo peor para Fabricio se adentraba en mi mente y en un momento un llanto desgarrador me corrompía el alma.

APOCALIPSIS Libro #2: "TODO EN BOCA DE LUNA"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora