Fui un niño súper dotado y privilegiado en aprender para desarrollar mis habilidades e inteligencia en el campo que quería estudiar de adolescente.
A los 25 años ejercía la medicina con una profesión paralela como ingeniero, realicé posgrado y estuve cinco años como médico en las fronteras trabajando para las ONG a nivel mundial.
Me he entregado por completo a mi profesión en la medicina sin permitirme tener relaciones estables sino superficiales.
A pesar de mi juventud tenía el don de salvar vidas de los pacientes con los casos más complicados y que otros médicos no se arriesgaban en operar o tratar el diagnóstico delicado que presentaban.
Luego de pasar cinco años como médico en las fronteras con la experiencia de haber vivido la verdad del mundo aislado y olvidado, donde las personas mueren por no tener recursos para sobrevivir, regresé al mundo paralelo y activo de las grandes ciudades.
La salud no tiene clases sociales ni un lugar selectivo geográfico para actuar y perdurar.
En cualquier lugar del mundo se ejerce la medicina para salvar vidas atacando las enfermedades que se radican en todas partes.
A media que ejercía la medicina mi don especial se desarrollaba para evaluar los casos más extraños en la salud siendo un asesor a nivel mundial para diagnosticar los tratamientos y la cura de los pacientes.
Operaba cuando otros médicos no tomaban el riesgo de hacerlo, según acuerdos con los directores y accionistas de las clínicas y hospitales que requerían de mis servicios.
Para salvar vidas solo solicitaba a los familiares y pacientes su confianza, paciencia y ser reservados en no divulgar mi identidad como médico, para evitar las noticias escandalosa de los medios de comunicación.
Luego de tener una trayectoria intachable, ¡nada es perfecto! sucedió un acontecimiento en Italia que me afectó y decidí abandonar mi carrera como médico.
Por una decisión no acertada o por la reacción del paciente aún sabiendo los familiares los riesgos que se corría al operar, el resultado fue fatal.
Mi paciente falleció y se trataba de un mafioso disfrazado de empresario.
Por más explicaciones que sostuve con los familiares se empeñaron en acusarme de negligencia médica del fallecimiento del paciente.
Me demandaron pero quedé absuelto de toda culpa con las pruebas y procedimientos médicos de que fueron ejecutados de forma correcta.
Pero la familia no quedó conforme y empezaron las amenazas que me asesinarían.
Hacia caso omiso a las llamadas amenazadoras, lo había notificado ante los entes policiales siguiendo el protocolo de denuncia.
Efectivamente la Policia Italiana estaba en proceso de averiguaciones de la familia Bartolini sobre sus negocios disfrazados.
Estaba tan entregado a mi profesión de médico que no le di importancia a las amenazas y aún más de saber que la policía seguía los movimientos de los integrantes de la familia Bartolini.
Mi rutina la había modificado pero en la medicina no tienes horarios y lo menos que haces es estar atento de las rutas, sino llegar lo más pronto posible a las emergencias que se presentan para salvar vidas.
Sucedió lo menos que me imaginaba, me secuestraron en plena vía camino a la clínica para atender una emergencia.
Estuve un mes secuestrado recibiendo maltratos y golpes de parte de los matones de la familia Bartolini.
Era la venganza por creer que había asesinado al jefe de la mafia, perdí peso, no me permitían asearme sino me vaciaban un tobo con agua fría y me daban las sobras de la comida.
Mi físico era la de un mendigo maltratado en las calles durmiendo en el piso.
Luché por sobrevivir a pesar de todos los golpes que me daban a diario, pasando sed, frío y hambre.
Mi fortaleza interna y mente poderosa me mantuvo vivo recordando a todas las personas que me agradecían por salvarles la vida.
Superé el trauma psicológico y físico luego de mi rescate, pero decidí abandonar mi carrera como médico.
En toda mi carrera había corrido los riesgo que otro médico no lo haría, mi Don se había apagado a raíz del trauma que viví en ese mes de tortura.
Un año después me recuperé al 100% física y mentalmente pero mi Don estaba ausente, así que me enfoqué en mi otra carrera como ingeniero.
Luego del suceso en Italia regresé a Estados Unidos con mi familia donde estuve un año para mi recuperación e inicié mi nueva vida en Canadá como Ingeniero trabajando con las mejores empresas del país.
Llevaba una vida de soltero con relaciones pasajeras y tranquila entre la vida social y el trabajo como empresario de mi firma registrada Constructora Hilton & Duncan.
Me había reencontrado con un gran amigo de la universidad en Canadá y nos asociamos para trabajar juntos.
Luego de 4 años con mi nueva vida dedicándome a construcciones y proyectos de grandes obras, recibí la noticia de mi familia que mi abuelo había sido hospitalizado.
Mi abuelo es una persona de carácter fuerte que dedicó toda su vida a la medicina creando la mejor clínica del país, con los equipos más avanzados en la tecnología y personal calificado.
Mi mentor en la medicina fue mi abuelo con su experiencia y enseñanzas que me inculcó desde niño la disciplina, responsabilidad y vocación.
Él fue el que me impulsó a viajar por el mundo para salvar vidas, él fue el que descubrió en mí el don de curar.
La relación con mi abuelo es especial y única, no solo es mi abuelo sino mi padre y amigo.
Mi padre me dió la noticia, reorganice mi agenda y dejé a cargo a mi amigo y socio la empresa.
Regresé a Estados Unidos para visitar a mi familia y a mi abuelo que se encontraba hospitalizado en la clínica Salud Hilton..
Había sufrido una parálisis en la parte derecha de su cuerpo por falta de oxigenación en el cerebro.
Fue atendido como un paciente más en su propia clínica con los mejores especialistas. Luego de recibir la llamada de mi padre me quede inquieto y preocupado.
Debía acelerar el cierre de un proyecto donde solicitaban mi presencia, me importaba una mierda si se negaban continuar con mi empresa, la salud de mi abuelo era más importante.
__ ¡Buenas Tardes! Gracias por asistir a la reunión sin previo aviso. Surgió una emergencia familiar y debo viajar a Estados Unidos lo más pronto posible y no tengo fecha de retorno.
Mi socio quedará a cargo de la empresa y de todos los proyectos, sé que unas de las condiciones propuesta por ustedes era que me encargara personalmente de la construcción, pero no voy a poder complacer su solicitud.
Como comprenderán mi familia está por encima de los negocios, les ofrezco la alternativa de seguir con el proyecto bajo la supervisión y ejecución del ingeniero Deluca que se encargará de cerrar el negocio con ustedes.
Los dejó en buenas manos, tengo que retirarme, debo abordar un avión.
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Latidos del Corazón ⚕️💓
RomanceLatidos del Corazón es la historia de Amaia Evans una chica que trabaja en una clinica donde se desempeña como doctora y enfermera ayudando a los más necesitados . Jack Hilton es un hombre atractivo con una mente brillante siendo una eminencia en...