black [hyuckmin]

getting better

La primera vez que Taeyong vió a Donghyuck en pantalones cortos quiso llorar. No sabía qué decirle ni cómo actuar ante la visión del castaño con tobillos no más anchos que su muñeca y rodillas esqueléticas que apenas lo sostenían.

No lo confundan, Taeyong había visto a Renjun en bañador y, aunque el chino era de complexión delgada, estaba menos delgado que Donghyuck. Eso sin contar que la normalmente piel canela del menor en sus piernas era sustituida por incontables parches morados y verdes, junto a varias cicatrices, un par de quemaduras preocupantemente grandes y una postilla que aún se estaba formando. Había pasado tiempo desde que Donghyuck había pasado por su casa, pero, aún así, su cuerpo necesitaba tiempo para recuperarse.

- ¿Hyung, me pasas mi chaqueta? - pidió con una sonrisa el menor -. Tengo algo de frío.

Tratando de ignorar el nudo que se le hizo en el corazón ante esa declaración, le tendió la chaqueta. Lo había leído antes, de cómo podía tener frío cuanto menos pesara. Había empezado a investigar en cuanto acogieron al castaño, pero cuanto más leía, más enfermo se notaba. Cogió aire un par de veces para que no le temblara la voz, temeroso de ofender o asustar al menor.

- Hyuck, acompáñame. Vamos a ver a Taeil hyung - pidió con la voz débil.

Hyuck cogió la mano que Taeyong le tendía algo extrañado, pero contento con el contacto físico.

Fueron caminando por la casa sin prisas pero en cuanto fueron a entrar en la zona hospitalaria el menor se sintió extrañamente mal, parándose en el sitio. Tenía el ceño fruncido ligeramente confuso. No sabía por qué su estado había cambiado, pero se fiaba de su cuerpo.

- No quiero entrar.

Taeyong se paró también para mirarlo alzando una ceja.

- ¿Pasa algo? ¿Estás bien?

- La última vez que alguien me llevó al médico no fue bien, no quiero repetir eso - murmuró asustado.

Casi notaba la piel vibrando bajo su ropa ante el recuerdo. Pareció hacerse consciente de sus heridas, sus piernas débiles y sus costillas magulladas.

- Es Taeil hyung, lo conoces, ya te ha tratado antes. No te va a pasar nada, lo prometo - Taeyong habló muy suave, intentando no asustar más al menor, como si fuera un animal salvaje.

Dudoso, Hyuck volvió a tomar la mano de Taeyong y juntos entraron a la enfermería.

Se sintió incómodo durante todo el proceso. Taeil le hizo varias pruebas y se sintió muy expuesto aunque no replicó. Tampoco cuestionó por qué le hacían las pruebas, pero al ver la mirada preocupada de Taeyong no se había atrevido a negarse. No es como si Taeil pudiera hacerle algo que no le hubieran hecho antes.

Tras terminar las pruebas, Taeil le dio algo de intimidad en la sala para que se volviera a vestir mientras él hablaba con Taeyong.

- Su peso está muy por debajo de lo normal y tiene muchas más cicatrices de las que le vi en un principio, sin contar heridas tanto internas como externas que han sanado mal.

- No hables tan alto, te puede oír - recriminó Taeyong al médico preocupado -. No sabía hasta qué punto iba a estar de mal, pero en mis sospechas no entraba esto ni de lejos.

- Necesita comer, dormir, un psicólogo y unas curas. En ese orden.

- ¿Alguna cosa en especial?

- Proteína, mucha. Necesita coger peso antes de que no pueda ni estar de pie de los mareos *- susurró el médico.

Taeyong asintió algo ido y le agradeció con una sonrisa.

[...]

- Esto es - Hyuck abrió los ojos asombrado - mucha comida.