Capítulo 6

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Francia

- ¿Cómo te fue en tu primer día? -me recibió Max al subir al automóvil

-Muy bien la verdad-bese su mejilla- ¿Cómo te fue a ti? ¿Te dieron los resultados de tus exámenes finales?

-Sip-saco un sobre sellado-Pero no lo he abierto, quiero que lo veamos juntos...-me miro un poco inseguro

- ¿Estas nervioso? -recibí aquella carta

-Un poco, Raúl era uno de los mejores y no quedó, desde ahí no he tenido el ánimo de abrirlo solo -confesó

-Tranquilo babe, confió en ti-abrí el sobre viendo la carta, arriba a la izquierda estaba el membrete de la policía nacional.

'Querido Maximiliano Higgins:

Por lo conferido en la ley (...) usted aprueba su examen y tiene que presentarse a la ceremonia de graduación el sábado..." deje de leer cuando un chillido de felicidad salió de mí.

- ¡Felicidades! - lo abrace- Yo sabía que tú eras el mejor-llene su rostro de besos para luego darle un pequeño pico en los labios

-No lo puedo creer... ¡Lo logre! -sus ojos estaban iluminados- ¡Oh por Dios!

-Eres el mejor, esto lo conseguiste con tu esfuerzo, dedicación y serás el mejor policía que tendrá Irlanda, ya lo vas a ver-le di un beso más

-Llegando a casa llamaré a mis padres-sonaba muy orgulloso de sí mismo- ¡hay que celebrarlo nena!

- ¡Si! -me senté de nuevo de manera correcta pero antes de que Max partiera el auto nos miramos e hicimos el bailecito de celebración de nosotros, soltamos unas carcajadas. Amaba que nos sincronizáramos así.

-Vayamos a cenar entonces ¿Donde siempre? -sugirió

-Oh Max...-recordé a Maura- hablando de eso hoy hablé... con Maura la abuela de Ayleen

- ¿Y qué sucedió? -encendió el motor para mover el automóvil de la entrada del orfanato

-Quiere que vayamos a cenar con ella...hoy-hice una mueca- espero que no te moleste, sé que es un momento importante, pero te lo recompensaré -le guiñe el ojo

-Hey nena-puso su mano en mi muslo- claro que no me molesta, así tú estás más tranquila para nuestra celebración- diciéndolo totalmente en doble sentido lo último, me reí.

-Eres un pervertido

-Me amas así

-Puede que si

El trayecto a la casa de los Horan fue tranquila, solo que algo en mi sentía una pequeña ansiedad, no me acostumbraba a que los Horan volvieran a mi vida, no después de tantos años.

En mi visión se apareció la linda fachada de la casa, ya estaba oscureciendo por lo cual las luces del jardín ya se dejaban ver. La puerta estaba cerrada por lo cual tome mi teléfono para avisarle a la madre de Niall que ya estábamos aquí.

En menos de cinco minutos, Maura ya estaba en la puerta recibiéndonos con una sonrisa, traía su típico delantal de "I ❤️ The Beatles"

- ¡Fran! -escuche al abrir la puerta

-Hola-sonreí, ya abajo con mi cartera esperé que Max asegurara el auto. Cuando mi chico está listo tome su mano y caminamos para quedar frente a frente con Maura

-Un gusto soy Max-saludó

-Encantada, Maura-me miró y me dio un pequeño abrazo- Estoy tan feliz que vinieras, Ayleen se volverá loca cuando te vea-me reí

-Yo no sé, que conexión rara tiene Francia con los niños, le juro todos se le tiran encima-bromeó Max, mientras nos encaminábamos a la casa

-Siempre ha sido así -concordó Maura

- ¿Ustedes se conocían?

-Si-respondí- ¿Recuerdas lo que te conté de mi ex mejor amigo?

-Oh, si

-Ella es su madre

No duro mucho la plática cuando un chillido feliz y agudo de Ayleen inundó la sala.

- ¡Fraaaaan! ¡Viniste! -la abrace

-Claro que vendría-bese su frente

-Te extrañe-se apegó más a mí

-Y yo a ti pequeña ¿Como te has portado?

-Muy bien-me sonrió para dejar en vista que ya no tenía uno de sus dientes

- ¡Wow! ¡Perdiste un diente! -dije emocionada

- ¡Si! Mi abue dice que tengo que dejarlo bajo mi almohada y vendrá el ratón Pérez

-El ratón está muy viejo-hice una mueca- pero tiene ayudantes ¿Sabias?

- ¿De verdad?

-Sip así que lo más seguro que un hada venga y te deje un regalo-sus ojos se agrandaron

- ¡¿Un hada?!-chilló más emocionada

-Sip, así que mañana me llamas para contarme que te trajo ¿Trato?

-Trato-unió su meñique con el mío

Caminamos al comedor y escuchaba las risas de Maura, seguramente Max me estaba avergonzado, maldito.

-Qué bueno que llegaron ya las iba a llamar-dijo Maura al calmarse

- ¿Por qué tanta risa por aquí? -elevé mi ceja mirando acusadora mente a Max

-Me contaba cómo se conocieron- me sonroje

- ¡Pero porque hiciste eso! -chille avergonzada

-Ella pregunto-dijo el chico que una vez más había vuelto a reír

-Ese era nuestro secreto

-Ya nena-me dio un pequeño beso-No te molestes con este papacito

-Idiota

-Las palabras Fran-me regaño Maura, juro que volví a tener doce años

Ayleen exigió su puesto a mi lado para por fin disponernos a cenar. Todo fue tranquilo, Max no dejo de contar historias vergonzosas, Maura reía y con Ayleen molestábamos a mi novio quitándole los cubiertos. Después de un rato, Ayleen se fue a dormir, yo miraba las fotos colgadas y aun que notaba un poco de decepción de Maura hacia Niall, seguía teniendo enmarcado los primeros periódicos donde salía el chico.

-Te extraña-habló de la nada Maura haciéndome saltar ¿Dónde se había metido Max?

- No se debe ni siquiera acordar de mi-sonreí triste

-Cuando se enteró que sería papá quería correr a contarte, te necesito mucho, pero tú ya no vivías ahí, sería bueno que hablaran- la corte

-Maura, yo también lo necesité, pero él no se comportó como yo quisiera que debía hacerlo, no sé si se enteró por las noticias o algo, pero no vivía ahí porque mis padres murieron, estaba viviendo con mi tía y recién ahora estoy de nuevo rearmando mi vida. Si estoy aquí es por Ayleen, ella necesita mucho amor y veo que el desagradable de Horan no, se digna ni siquiera cinco minutos con ella, tal vez duele escuchar que hablan mal de tus hijos, pero Maura, el murió para mí y espero que entiendas que no estoy interesada en verlo.

Idiota «Niall Horan»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora