Parte 2, Capitulo 5

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En un lago escondido, en una selva de la lejana Asia, había un oleaje particular, iba desde el centro hacia las orilla, Nadia estaba flotando sobre este, no tan lejos de la superficie, miraba atentamente en centro de este cuerpo de agua.

Miro su reloj y estiro su mano, del lago saco una gran bola de agua, que emitía una fuerte energía que se dispersaba como ondas en el aire, hacía que los árboles se movieran, dentro de esta había una criatura humanoide con aletas, branquias y colmillos afilados, que se movía con ganas de escaparse.

-Aun no controlas tu estado acuático-Grito Nadia, causando que la criatura empezará a gritar y a enviar mucha más energía, causando que las ramas de los arboles fueran arrancadas.

La de mechones azules, saco a la criatura del agua enviándola a la tierra, en la cual boqueaba y sufría por respirar, de a poco su estructura corporal empezó a sonar y volvió a su estado natural, vomitando agua y respirando, se acomodó los cabellos y busco algo para secarse.

-Pensé que las aguas de este lago mágico calmarían mi magia de agua pero no-su cabello goteaba de aquella agua mágica, que según la cultura Aquos regeneraba la magia turbulenta que a veces presentaban los hechiceros de esta facción. -Puras patrañas.

-Elrich, tú no eres como los demás, llego Nadia hasta el, tus magias con opuestas y muy poderosas, un lago no puede curar tu magia, debes ser tu-Le coloco la mano en el hombro y un chispazo los molesto a ambos-Deja de hacer eso.

-Lo siento pero desde que di a luz mi magia esta fuera de control-suspiro y se secó de inmediato soltando vapor, se recogió el cabello y Nadia vio la marca que estaba algo rojiza y se veía que dolía-Desde que aprecio esto no puedo controlar mi magia.

-¿Qué es eso?-Pregunto la de lentes, y lo toco y al hacerlo esta se llevó un buen corrientoso- ¡Mierda!

-Solo yo o Stefan puede tocarlo, a él le salió pero se le sano rápido ahora es un bello tatuaje color plata que brilla al sol, pero el mío aún se ve mal y parece infectado-Se terminó de vestir y se sentó en una roca-Siento que algo mal va a pasar tengo ese leve presentimiento y Sessej también me lo ha expresado.

-Sera algún tipo de profecía o algo que estas ocultando-Los ojos de Elrich la enfocaron, dio justo en el clavo, pero no debía decírselo a nadie, pero se estaba atragantando con esa verdad, se sentía miserable, hace una semana y media, lucio había nacido y ya está fuerte y grande, se presentó a los soberanos y fue ungido como el primer heredero al trono de la familia Stromgerber-Lebertif.

Todos estaban felices, era una época de rara felicidad imperturbable, eso era sospechoso, nunca había tanto tiempo de felicidad sin alguna tragedia.

-¿Entonces no podrás asistir a mi fiesta de cumpleaños?-Murmuro esta.

-Si solo déjame relajarme y ver como hago para contralarme-Le sonrió levemente, pero él sabía que eso que tenía atravesado entre pecho y espalda, no dejaría que su magia fluyera.

-Bueno espero asistas, será en el palacio perla en el mar caribe-Se agacho esta y le levanto la cabeza-Saldrás de esto como lo haces de todo, sí.

-Si-Susurro este, con los ojos brillosos, la hechicera se hizo agua y se fue, este suspiro estiro sus brazos-Dejamos que fluya, se sentó en pose de yoga y empezó a levitar, el agua empezó a llegar a él y su energía salía a oleadas de su cuerpo.

Ilios apareció frente a él, tan sigiloso que el príncipe no se dio cuenta, Ilios dio se acercó tanto que respiraron el mismo aire, sonrió y le hizo una espiral atravesado por una línea diagonal en su frente, con magia angelical.

-Debes decirle la verdad a todos-El ojiazul dio un brinco y dejo lo que estaba haciendo-Tienes los sentidos cegados, eso lo que escondes está disminuyendo tu capacidad mental, mágica y física.

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⏰ Última actualización: Nov 10, 2020 ⏰

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Los Soberanos: Elegidos ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora