Mujeres [YoonMin/TaeGi] ''PAUSADA''

Capítulo VII

Eran al rededor de las una de la tarde cuando el timbre sonó avisando que era hora de almuerzo. Todos salieron casi corriendo al comedor junto a sus mochilas pues se debían cambiar todas las clases. YoonGi fue uno de los últimos en salir puesto que necesitaba ir al baño y esperaba que todos estuvieran en el comedor para ir. Pero su profesor y también tío lo detuvo. El chico sabiendo lo que querrá decir el mayor solo se dio la vuelta encarandole.

—¿Ocurre algo?— Preguntó con cierto fastidio en su tono. Quería ahorrarse esa charla para ir al baño. Su cara de desagrado conjugando la pregunta le causó cierta risa al mayor.

—¿Que si ocurre algo?— Habló entre risas sin poder creerlo.— Min YoonGi, ¡Estás disfrazado de mujer!.— Exclamó riendo provocando que el menor tapase su boca con sus manos para callarlo.

—Tampoco debes gritarlo a los cuatro vientos.— Le recriminó. Cuando su tío había dejado de reir YoonGi quitó sus manos de la boca de su familiar y suspiró amargamente con sus ojos cerrados. —Quiero alegrar a un amigo, quiero intentar que su sonrisa vuelva a brillar y que sus ojos muestren ese brillo de siempre.— Sin más que decir tomó su bolso y salió del salón tomando rumbo hacia los baños, miró a cada lado unas cinco veces para entrar al baño de hombres. Observó con cuidado que nadie le viese ahí e hizo sus necesidades.

Su mente comenzaba a volverle loco. Se decía a si mismo que esto era realmente estúpido. Era su primer día y JiMin ya lo había marcado como "rara" sin siquiera conocer a YoonGi versión mujer. Miró sus zapatos suspirando triste, pero aquel suspiro fue interrumpido por la puerta principal del baño abriéndose. YoonGi corrió a un cubículo del baño donde se encontraba el sistema de cadenas para controlarlas cerrandolo con seguro subiendo sus piernas hasta su pecho y tapando su boca. Tenía suerte de que en aquel cuarto de cadenas se encontrase un inodoro.

Escuchó unas voces provenientes de unos hombres. Se escuchaban algo bajas pero pudo escuchar perfectamente un gemido acompañado de un "JungKook.. aquí no..". Se quedó en silencio observando por la abertura que separaba la puerta de la pared como aquellos muchachos deboraban sus bocas y tocaban cada parte de sus cuerpos con especial enfoque en el abdomen del chico que trabaja en la tienda y en la entrepierna del chico de gafas genio de la clase. YoonGi no podía sacar la mirada de ambos chicos, por alguna razón le intrigaba aquello y también le intrigaba el porque de una palpitación entre medio de su falda. JungKook tomó por las piernas al chico de piel más tostada sentandolo en el lavamanos sin dejar de besarlo y tocarlo cuanto quiera. Bajó un poco más su cabeza despojando del cuerpo del pasivo sus pantalones pero ahí YoonGi supo que no debía seguir viendo.  De su bolso sacó unos audífonos y puso música evitando escuchar los pequeños gemidos de TaeHyung.

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YoonGi no podía prestar atención a la clase producto de que JiMin lo observaba con curiosidad. Jugueteaba con el lápiz mientras sentía su mirada en su nuca. En aquella clase no estaba NamJoon por lo que solo le quedaba evitar sentir esa mirada cortante.

El profesor tuvo que salir producto de que unos estudiantes estaban discutiendo a golpes afuera. La mayoría de sus compañeros de clase fueron a ver y fue ese momento en el cual un pequeño rubio decidió hablar.

—¿Por qué YoonGi hyung se fue?— Preguntó observando la espalda de su compañera. YoonGi tragó en seco, había olvidado la mentira que había dado a conocerle a JiMin.

—Pues..— Titubeó girando su torso en dirección de su amigo.— Supongo que tenía sus razones, no conozco muy bien a mi primo.— Respondió dando una sonrisa nerviosa tratando de verse linda ante él.

—Si tiene como comunicarse con él por favor digale que me llame.— Sonrió provocando que sus ojos fuesen pequeños, una linea para ser exactos. Sin más que decir apoyó sus brazos en la mesa y escondió y rostro en ellas. Aquella sonrisa le recordaba a la de YoonGi y se sintió melancólico al recordar sus momentos de buenos amigos.

—Claro, le daré el mensaje.— Susurró y volvió a su lugar sintiendo el corazón a poco de explotar.

JiMin comenzaba a causarle ciertas cosas dentro de si, aunque esperaba y suplicaba a cada dios existente que fuera el nerviosismo de ser descubierto y no aquel sentimiento que posiblemente crecía dentro de JiMin.