Mujeres [YoonMin/TaeGi] ''PAUSADA''

Capítulo IX

Con sus suaves y grandes manos acarició la mejilla de Min YoonJi con delicadeza. Tenía sus ojos cerrados descansando su cabeza sobre sus brazos con una expresión relajada. Tae tenía tres problemas, uno de ellos era la joven que disfrutaba de aquellas caricias inconscientemente.

La cabeza de Taehyung era un alboroto total, al igual que su corazón. Amaba a Jungkook pero le hacia daño, le gustaba YoonJi pero no puede olvidar a Jungkook y YoonJi ama a alguien más. Cuando escuchó los gritos de los estudiantes despertó a la chica de un movimiento brusco y corrió a su asiento.

[...]

Cada semana podía ver como Jimin se acercaba y se alejaba cada vez más. Namjoon seguía en su mundo con SeokJin y Taehyung ayudaba al pobre corazón de YoonGi. Una vez por semana visitaba la biblioteca de la escuela donde trataba de hablar con el chico de mejillas rellenas pero este solo estaba harto de ella, su enojo se acumulaba mientras pensaba 《no puede entender acaso?!》 Hasta que le gritó en medio de la biblioteca.

-Por los dioses ¿¡puedes entender que no quiero estar cerca de ti!?- Exclamó enojado levantandose de la silla bruscamente. No se escuchó el típico shhhhh sino que todos se quedaron en silencio. Jimin cerró su libro con furia y lo devolvió al estante. Miró por última vez a YoonJi mientras tomaba su mochila recriminandose en su interior y repitiendo la palabra idiota. Se colocó su mochila mientras caminaba y escuchó un sollozo, una voz quebrada y el sonido de un corazón rompiendose.

-Lamento ser prima de YoonGi y lamento querer acercarme a ti.

Jimin no se quedó a consolarla, es más, se fue sin decir nada ni detenerse en el camino. Llegó al baño de varones y se encerró en un cubículo para gritar mientras mordía su mano. Le dolía, dolía tener cerca a alguien tan parecido a YoonGi. Quería golpearlo pero también abrazarlo, llorar y reír junto a él. Ver a YoonJi le daba dolor más del que le causaba al ser tan frío y cruel con la pobre chica.

Aún encerrado en el cubículo escuchó voces y sonidos extraños. Quiso salir de ahí pero pudo percibir que el ambiente era algo... caliente por decirlo de alguna manera. Jimin quería salir de ese baño pero no quería meterse en problemas con quienes estaban ahí.

-K-Kook no...- Jadeó Taehyung sentado sobre el lavado con Jungkook besando su cuello y tocando su espalda, no hacia caso a las peticiones del pasivo así que bajó sus manos hasta el pantalón. -¡Dije que no!-Taehyung lo empujó tan fuerte que chocó contra la puerta de un cubículo. Jimin se asustó por el ruido y comenzó a mirar el techo rogando que se fueran.

-¿¡Que te pasa Taehyung!?- Jungkook se acercó rápidamente al nombrado, Tae usó sus pies para patearlo en el pecho y evitar que se acerque.

-Ya no quiero..- Su voz apenas se escuchaba, comenzó a llorar mientras trataba de detener al chico con la poca fuerza que tenían sus piernas.

-Que dijiste?- Preguntó con cierto enfado mientras sujetaba los pies del contrario.

-¡Que ya no quiero ser tu juguete Jeon Jungkook!- Exclamó y pateó a JungKook en la cara para luego con el miedo a flor de punta salir corriendo del baño. Jimin se sorprendió al escuchar el nombre de su amigo.

Sonó el timbre que indicaba la vuelta a clases, Jimin no quería salir antes de escuchar a aquellas dos personas con problemas que salieran del baño. Jimin escuchó la pelea completa que tuvo la pareja, escuchó los pequeños golpes que se dieron al piso y a las paredes, los llantos de Taehyung y los suspiros frustrados de Jungkook. Pasaron minutos interminables que parecían horas hasta que alguien salió. El chico atrapado se agachó un poco para ver por debajo de la puerta y no encontró a nadie dentro, suspiró exhausto y se levantó abriendo la puerta con una pequeña sonrisa. Fue al lavamanos a mojar su cara y salir en dirección a enfermería ya que no quería entrar a la clase que le tocaba junto a Yoonji. Al llegar a enfermería se excusó que tenía diarrea y necesitaba descansar.

Dentro del baño encerrado en un cubículo estaba Taehyung llorando abrazando tu chaqueta con fuerza y reprimiendo sus gritos en ella. No escuchó a Jimin, ni a nadie entrar al baño por lo que se sintió libre de llorar cuanto quiera hacerlo.