Inspector Hood. (Calum Hood)

31.

Suspiré. Era el momento.
-El hombro se curará bien y pronto.
-Genial. - bebio cerveza.
-Hay algo más.
Calum me miró directamente.
-He tenido un aborto. - Fue más difícil decirlo de lo que pensaba.
-Estabas embarazada?
Asentí.
Por primera vez, sentía ganas de llorar.
-No lo sabía. Y... Bueno, por lo visto mi útero se ha visto muy dañado y... No voy a poder tener hijos.
-Joder...
Calum se pasó las manos por el pelo.
Yo estaba temblando. Tenía que decirle que había perdido a su bebé.
-Era de Luke?
Entonces, los ojos se me llenaron de lágrimas.
-Era tuyo.
Calum palidecio, pero se levantó y con sumo cuidado me rodeó con sus brazos.
Me escondí en su cuello y lloré.
-Es... Extraño. Yo nunca he querido niños. Pero ahora... Saber que he perdido uno, sin ni siguiera saberlo. Es...
Sentí sus labios en mi sien.
-Shh.
Levante la mirada, aun llorando.
-No tenía ni idea de que estuviera embarazada, joder. Ni siquiera me lo podría haber imaginado.
Calum me besó en la mejilla una y otra vez.
-Joder, siento ponerme así.
Me limpie las lágrimas y suspiré.
Calum, con la manga de su sudadera limpio mis mejillas.
Cerré los ojos.
-Puedo besarte?
Asentí.
Me beso muy despacio, como si tuviera miedo de romperme o hacerme daño.
-Siento mucho que todo esto haya pasado.
Me abrazo.
Escondí la cara en su cuello y suspire.
-No es culpa tuya, Calum.
Me acariciaba el pelo y me besaba en la sien.
-Quieres quedarte a cenar?
-Puedo quedarme a dormir? No quiero estar sola.
-Claro que si. Quieres ir dentro?
-Vale.
Esa noche fue la primera en la que me quedé a dormir en casa de Calum.
Ninguno de los dos parecía querer estar solo.
Ya en la cama, con Duke tumbado a nuestros pies, Calum me tapó y se tumbó a mí lado.
-Cuando te van a devolver la placa?
-No lo sé. Tiene que estudiar el caso un tribunal.
Calum se tumbó de lado, mirándome. Yo, por mis heridas, no podía tumbarme así.
Me abrazo por la cintura y se pego todo lo que pudo a mi.
-Puedo hablar con él capitán. Decirle que no fue culpa tuya. No hubiera influido en nada que tú estuvieras ahí, Cal.
-Mañana lo hablamos, vale?
-Vale, buenas noches, Calum.
-Buenas noches, Darri.
Todo era distinto.