Inspector Hood. (Calum Hood)

33.

Dos minutos. Dos minutos y me podría ir a casa.
Me levante y deje todo lo más recogido posible.
-Irwin. Me voy.
-Vale, nos vemos mañana.
Sali de la comisaria con el bolso al hombro.
En la calle, Luke me esperaba sin yo saberlo.
-Que haces aquí?
-Calum me dijo lo del disparo. He venido a verte.
-Como sabías que iba a estar aquí?
-He ido a tu casa y no había nadie.
-Bueno, pues estoy bien.
-Por qué dejaste de llamarme.
-En serio?
Asintió.
-Tal vez por qué tienes novia. O tenías. No me importa.
-Ella ya no está.
-Y debe hacerme sentir mejor?
-Ven a cenar conmigo.
Solté una carcajada.
-Luke, eres idiota.
-Por qué? Por querer estar con la chica que me gusta?
-No lo entiendes verdad? Eres un cerdo, un capuyo. Yo no soy el segundo plato de nadie. Y esa pobre chica... Joder Luke. Eso no se hace, es sucio y rastrero.
-Déjame invitarte a una copa al menos.
-No lo intentes.
Un coche paro enfrente. Mi coche para ser más claros.
Calum. Venía a por mi.
Bajo del coche y camino hacia nosotros.
-Ey, Luke, que haces aquí?
Se dieron un abrazo.
-He venido a ver como estaba Darri.
Calum asintió.
-Nos vamos ya? - dije girandome hacía Calum.
-Si, claro.
Calum puso una mano en mi hombro.
-Nos vemos Luke. - dijo él.
Luke se quedó pasmado viendo como nos montabamos en el coche.
Yo aun no podía conducir, así que era él quien lo hacía.
-Puedo preguntar de que hablabais?
-Quería que saliéramos.
Calum apretó el volante.
-Hablé con él. Le dije que teníamos algo.
Calum sonaba herido.
-Joder.
-Luke es mi mejor amigo, Darri. Lo conozco desde siempre. No puedo creer que este haciendo esto.
-Calum, oye. Luke es un capuyo, vale? Los dos lo sabemos, y no va a cambiar nada. Pero tienes cosas más importantes que pensar.
-Eso es egoísta, Darri.
-Lo sé, pero mañana te vas a enfrentar a un grupo de personas que van a decidir si sigues o no trabajando.
-No hace falta que seas tan borde.
Tome aire y mire por la ventana unos segundos.
-Si, lo siento. Pero por favor, intenta no darle importancia. No es el momento.
Calum me había enseñado que no podía ser una idiota con todo el mundo. No me podía comportar con él como me comportaba con los delincuentes que detenía.
-Vale. - sujeto mi mano y besó mis nudillos sin dejar de mirar la carretera. - Vendrás mañana?
-No creo que pueda. El capitán ha hablado conmigo.
-Que le has dicho.
-Que no sólo fue tu culpa.
-Darri...
-Calum, le he contado la verdad, le he dicho que estamos... Bueno, si, que hay algo y que no sólo fue tu culpa. Me ha dicho que no lo nombrará.
-Espero que no te hayas metido en ningún lío.