- ¿Insinúas que algo malo va a pasar?- No- negó con la cabeza- Lo único que pasará será tu vida. Por eso debes aprovecharla.
- ¿Y no es eso lo que yo hago?
- No lo sé, por eso te lo digo. Cuando escribiste mi historia tenías seis años, aún eras una niña. Una niña que a veces se sentía sola. Ahora has crecido, pero no debes sorprenderte por ello.
- ¿Sorprenderme? ¿Qué iba a sorprenderme?
El chico siguió sonriendo.
- Sería difícil no sorprenderse por nada. La vida son sorpresas.
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El niño de la luna
Nouvelles- ¿Y cómo has llegado hasta aquí arriba? - Igual que tú, flotando y elevándome. - ¿En globo? - En muchos globos, cada uno de un color diferente.