Ese chico es un ¿¡IDIOTA!? [Borrador]

3

El día del evento había llegado así que Lucy, Lautaro y yo quedamos de vernos en la entrada principal del centro de convenciones en donde se llevaría a cabo el evento, y habíamos quedado con los demás chicos que los veríamos en la plaza en un punto especifico, de paso nos presentaríamos ya que aún no nos conocíamos en persona.

Al llegar al lugar pasamos a comprar el tiquete para los cosplay y nos dirigimos a los vestidos para prepararnos con nuestros respectivos trajes. Media hora después Lucy me ayudaba a terminar de detallar mi cosplay de Kurumi y yo de acomodar bien su minifalda y su top, nos aplicamos un poco más de maquillaje y listas para salir.

Al llegar a la salida de los vestidos un Natsu/Lautaro nos esperaba apoyado en la pared con parte de su torso descubierto, dejando a la vista una muy buena porción de su blanca piel —debo decir que tenía un abdomen marcado— observé a Lucy y sonreí al ver la mirada lujuriosa que le lanzó y que este no pasó desapercibido regalándole una sonrisa pícara, así como también notamos las dos chicas que se acercaron a pedirle tomarse una foto con él. Lucy bufeo cuando una de las chicas le pidió que tomara la foto, mi amiga no se opuso, pero luego de devolverles el celular rodo el cuello de Lautaro con sus brazos y le devoró la boca delante de las chicas, las cuales prácticamente salieron corriendo captando muy bien el mensaje —él es mío— que Lucy les dio y yo no pude evitar reírme a carcajadas.

—Cuando tengas un novio y lo ames tanto como yo amo a Lau harás lo mismo —me aseguró soltando a Lau.

—Hmmm —puse mi mano en mi barbilla fingiendo que pensaba —A lo mejor lo haga, pero yo no me veo en esas —y era cierto sé que soy celosa, pero no me gusta presumir lo que se supone que es mío y tampoco dar muchas muestras de cariño en público. —Por cierto, tu labial se corrió.

Le señale a Lau que estaba todo manchado de labial.

—Va a pasar —me aseguró —y ese día tendré una buena evidencia para recordártelo.

Lucy sonrió, saco una toallita del bolso para limpiar a Lau y luego se retocó el labial.

—Está bien —levante mis manos mostrándome inocente—. Vamos a guardar las cosas y a reunirnos con los demás.

Lucy asintió, tomo de la mano a Lau (que por cierto se veían muy lindos juntos) y nos dirigimos hacia el lugar que habían asignado para guardar, y de ahí nos reuniríamos al otro lado de la plaza con los demás del grupo, para poder identificarnos con los cosplay (los que llevaban) y hacer una presentación ya que aún no nos conocimos todos, de hecho, Lucy era la única que los conocía a casi todos y Lucy repartiría cintas a todos, ya que como una forma de identificar al grupo habíamos acordado llevar una cinta fucsia atada en la muñeca.

Al llegar al punto de encuentro pude ver a muchos ahí y efectivamente eran parte del grupo, no todos iban vestidos de cosplay, ya que no pudieron conseguir uno, pero si la mayoría y me pareció divertido. Muchos de los ahí reunidos saludaron a Lucy y se hicieron varias presentaciones entre todos algo así como el primer día de clases en donde todos nos presentamos y así saber quiénes éramos, habíamos alrededor de veinte chicos y chicas. Debido a que no queríamos ir todos en pelota, habíamos decidido hacer pequeños grupos para desplazarnos por el lugar y así visitar los distintos puesto y actividades y nos veríamos a una hora acordada los que quisieran comer fuera de la plaza en algunos de los restaurantes cercanos.

Yo me quede en el grupo que formamos Lucy, Lau y tres chicos más, y empezamos a recorrer la plaza observando los diferentes puestos. Al llegar a uno de ellos me enamoré de una almohada y para mi suerte Lau también ya que la quería para regalarse a Lucy por lo cual teníamos una pequeña pelea a ver quién la compraría, pensamos en tirar la moneda, algo un poco complicado por la cantidad de personas, luego en piedra papel o tijera, Lau lo rechazó. Mientras nuestra discusión continuaba observé a un chico acercarse a Lucy para saludarla con abrazo y beso en la mejilla, Lau que había visto lo mismo que yo, me dio la almohada, se dirigió hacia ella colocándose a su lado haciendo una clara representación de macho alfa, pecho peludo y lomo plateado, reclamando lo suyo —ambos eran tal para cual— y Lucy los presentó.

Me quedé como boba observando al chico por unos minutos —creo que hasta se me salió la baba— era guapísimo, más vestido con un sexy cosplay de Ayato una de los sexys vampiros de Diabolik Lovers (una de mis series favoritas de anime) y yo no pude dejar de mirarlo, Lucy sonrió al verme y se acercó a mí con esa expresión picara en su rostro.

—Cierra la boca que se te sale la baba —me susurró con una sutil sonrisa que parecía el intento de ahogar una carcajada.

Yo la observe y le sonríe mientras ella le hacia un gesto con la mano al chico para que se acercar a nosotras.

—Au él es mi amigo Alejandro —anunció.

Lo observé de arriba abajo sin perder un solo detalle, vaya que era muy guapo y se veía diabólicamente sexy en ese traje.

—Y Ale ella es Aubrey mi nueva mejor amiga.

Alejandro se acercó a mí, me besó en la mejilla. Me estremeció estar junto a él.

—Un gusto Alejandro y hoy soy Kurumi Tokisaki —le dije con un gesto en la mano que mostraba mi traje.

Me guiño el ojo y me regaló una deslumbrante sonrisa.

—En ese caso, yo soy Ayato Sakamaki.

—Un sexy y jodido vampiro, espero que no quieras chupar mi sangre, aunque tampoco me opondría si lo hicieras. —¡Mierda! de donde me salió tanto descaro. Juró que no soy así, pero no podía evitarlo este chico me hacía reaccionar así. Volvió a sonreír y mi tanga se derritió.

—De momento no tengo pensado beber sangre, pero te puedo tomar en cuenta más tarde. Cuando este sediento —comentó con picardía.

Y resulta que también era jodidamente coqueto, mi mirada se cruzó con la de él y esa fue mi perdición me quedé ahí perdida totalmente.

Lucy carraspeo y ambos rompimos el hechizo.

—Pensé que no vendría Ale, como te saliste del grupo.

—Debo cuidar a mi nena ya que ahora tiene novio y anoche te dije que vendría.

¿Nena? En donde me perdí. Observé a Lau y este tenía la misma incógnita.

—Ale ha vivido junto a mi cada desde que tengo memoria y hace algunos años se programó mi padre —nos explicó Lucy —aunque ya tenga un padre.

Lau tomó la mano de Lucy y le susurró algo al oído.

—¿Ale nos acompañaras o andas con alguien más? —indagó Lucy.

«Que se quede con nosotros» decía mi voz interior.

¡Demonios! ¿qué me pasa con este chico? Era la primera vez que me sentía así, incluso tenía una extraña sensación en el estómago.

El me observo dibujando nuevamente esa sonrisa derrite bragas y aceptó la invitación de Lucy, haciendo que mi yo interior diera saltitos de felicidad. No sé que carajos tenía este chico, pero si algo sabia era que quería estar muy cerca de él.