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Había pasado una semana desde que vi a Alejandro con su ex en el cine, debo admitir que me dolió bastante pero me resigne ya que aún no le habíamos dado nombre a nuestra relación, aunque debía admitir que lo que más me dolió fue que el no hubiera ...

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Había pasado una semana desde que vi a Alejandro con su ex en el cine, debo admitir que me dolió bastante pero me resigne ya que aún no le habíamos dado nombre a nuestra relación, aunque debía admitir que lo que más me dolió fue que el no hubiera sido sincero conmigo.

Al lunes siguiente de haberlo visto recibir un mensaje de buenos dias, Alejandro nunca había sido cariñoso ni de apodos en este tiempo juntos y ver un "Buenos días mi amor" me encabrono bastante ¿acaso estaba disculpándose?, así que lo borre.

Luego de ese mensaje había recibido varios a lo largo de la semana así como llamadas y también había llamado a Lucy un par de veces preguntando por mi y ella se comporto como las mejores de las amigas y no le hablo absolutamente nada de mi o de que lo habíamos visto.

Por dicha iba para semana de exámenes y me consentre en mis estudios, le pedí a Lucy no vernos por un par de semanas y si Alejandro le volvía a preguntar por mi le dijera que estaba fuera de la cuidad y así fue, luego de varios días dejé de recibir sus llamadas y luego de un mes sus mensajes.

Un año después

El sonido de ni celular me despertó, lo busqué a tientas por la cama y lo encontré cerca de mi almohada, observa la pantalla, nuevamente una llamada de Lucy, ya la había mandado a buzón varias veces, la noche anterior había salido con mis compañeros y me cargaba una resaca bien jodida y sin contar que apenas había dormido.

—Alo —Le conteste con voz soñolienta.

—¿Por que no contestas?
Retire el celular de mi oído al escuchar su tono de protesta

—Estaba dormida.

—Es la una de la tarde, durmiendo a esta hora.
Me quité nuevamente el celular del oído y observe la hora, tenia razón.

—Mierda! Te dije que iba a salir con mis compañeros y llegué de madrugada y deja de gritar me duele la cabeza.

—Ahora mismo te levantas y te das un baño ya que me prometiste acompañarme para comprar un regalo para Lau.

—¿Baile sexual como el año anterior?
No la vi pero pude darme cuenta que se había sonrojado.

—No este años solo me compraré algo sexy, Lau muere por una figura de  Natsu y en la nueva tienda del centro comercial esta y pienso regalarsela, además Lau quiere ir a comer a un restaurante japonés asi que queríamos saber si nos acompañas últimamente casi no te vemos y Lau no te ve desde hace 6 meses.

Y era cierto desde que no quise saber nada de Alejandro me había alejado un poco de ellos, a Lucy si la seguía viendo y hablando pero no tan seguido y cada día me distanciaba más y a Lau lo evité desde que me enteré que se estaban haciendo amigo de Alejandro y hacían cosas juntos.

—Te acompañaré a comprar el regalo pero no te prometo que vaya a comer con Ustedes.

—Au please! Seria tu regalo de cumpleaños.
Se que si ella estuviera aquí me haría los ojitos del gato de Shrek.

—Dejame pensarlo si.

—Ya me encargaré de convencerte.

Dos horas más tarde entraba con Lucy en la tienda donde comprariamos la figura. Lucy la aparto mientras íbamos a las otras tiendas a comprar las demás cosas.

—Pensé que le harías un baile o algo así.

—No, lo pensé pero si lo hago se convertirá en rutina y no lo quiero, así que solamente me compraré algo más sexy de lo normal y un par de juegos para la noche para seducirlo.

Me rei a carcajadas.

Como Lucy había afirmado luego de entrar en la sex shop, Lucy compró un mini conjunto de encaje, un lubricante y un par de dados para la noche, luego nos dirigimos hacia otra tienda en donde me hizo probarme vestidos y luego de sobornarme con uno acepte acompañarlos al restaurante a comer.

Nuevamente el celular me despertó, lo tomé y al mirar la pantalla vi que era Lucy.

—¿Por que carajos no contestas!?

—Deja de gritar, estaba dormida.

—¿Volviste a salir a beber?

—Obvio no, después de que regrese me clavé con una serie y me dormi tarde.

—Más te vale, recuerda hoy a las 8 para la cena.

—¿puedo decir que estoy enferma?

—No, ni se te ocurra además me vas a acompañar al salón para arreglarme las uñas.
Solte un suspiro, desde hace unos meses que Lucy había empezado a trabajar en una oficina se había vuelto más vanidosa y era normal que una vez al mes pasara casi un día completo en el salón de belleza.

A las 8 en punto estaba llegando a uno de los mejores restaurantes japonés en la ciudad, en donde Lucy y Lau ya me estaban esperando, supe que Lau había tenido antojos de comer comida japonesa ya que había visto un nuevo anime donde preparaban comidas.

Llevábamos una hora entre sonrisas y probando diferentes platos cuando ambos se quedaron en silencio, los observé y tenia su mirada clavada tras de mi, al voltearme vi a Alejandro congelado tras de mi, volví a ver a mis amigos.

—¿Esto es idea de alguno de ustedes?
Ambos negaron con la cabeza sin emitir sonido.

—Au ... —Alejandro quiso hablar pero no se lo permiti.

—No me digas absolutamente nada —Me levánte y cogi mi cartera —Lo siento pero me voy —Les dije a mis amigos.

—Espera Au.
Lucy camino tras de mi, me detuve y escuché que Lau discutía con él diciendole que era un idiota.

—Maldición lo se pero quería verla.

—Lu lo siento no puedo quedarme.

—Au te juro que no sabia nada.

Lucy estaba angustiada.

—Lo se, Lu descuida solo debo irme.

Me volteó pero antes de que pudiera avanzar una mano me detuvo del brazo con fuerza.

—No te dejaré ir sin hablar antes contigo.

Lo observé a los ojos y luego observé como todos tenían la mirada clavada en nosotros.

—Alejandro sueltame no quiero hacer el ridículo.

—Entonces hablemos o lo haré.

Solte una maldición.

—Ok pero aquí no.



Ese chico es un ¿¡IDIOTA!? [Borrador]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora