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Debido a que la próxima semana sería el cumpleaños de Lucy a Lau se le habia ocurrido ogarmizarle algo y ya que hacia más de un mes no nos veíamos le propuse a Lau, que viajarán aquí y yo me encargaría de organizarle todo

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Debido a que la próxima semana sería el cumpleaños de Lucy a Lau se le habia ocurrido ogarmizarle algo y ya que hacia más de un mes no nos veíamos le propuse a Lau, que viajarán aquí y yo me encargaría de organizarle todo.

Lau, Lucy, Josh y Drew habían salido muy temprano el sábado para pasar el mayor tiempo posible en mi casa, aprovechando que Josh había comprado un auto y así podrían viajar sin estar atados a los buses y se iban a quedar en mi casa esta noche.
Aún no tenia idea de donde los iba a acomodar pero el hecho de que ellos pasaran aquí el fin de semana me hacía  muy feliz.

Luego de recibir el mensaje de Lau, llamé a Ignacio el cual me estaba ayudando a organizar todo sobre la sorpresa que le estaba preparando a Lucy y también estaba ansioso de conocer a mis amigos y que él ahora era uno de ellos.

La relación entre Ignacio y yo había avanzado bastante después de que le habia hablado de mi y nos habíamos muy buenos amigos, por lo que cuando le hablé de lo que le estábamos planeando a Lucy no dudó en ofrecer su ayuda.

Media hora después escuché que tocaban mi puerta y rápidamente la abrí, era Ignacio el cual venía con algunas bolsas.

—Puedo saber que es todo eso —señale las bolsas.

—Algunas cosas que creí  necesarias.

Me dio un beso en la mejilla y entro dirigiéndose a la cocina y coloco las bolsas en el mueble.

—Traje también una colchoneta supongo que la necesitas, y sabes que me mi casa hay un cuarto extra.

—Cuando vengas lo chicos lo hablamos, de momento déjame ver que traes ahí.

Empezamos a sacar todo lo que Ignacio había traído y me puse a preparar el almuerzo en compañía de él.

Cuando los chicos llegaron una hora después un exquisito aroma a pollo al horno inundaba mi casa y Ignacio le daba los últimos retoques a la ensalada de patata.

—Crees que les caiga bien? —preguntó Ignacio al escuchar la puerta, se notaba algo nervioso.

—Todo va salir bien, ya los verás.

En cuanto abrí la puerta la radiante sonrisa de Lucy fue lo que vi y luego nos fundimos en un fuerte abrazo, cuando nos soltamos la tomé de la manos y la observe para mi sorpresa ya su vientre estaba bastante abultado.

—Veo que los enanos están creciendo bastante —lleve la mano y acaricie su pancita —¿ya saben que son?

—De momento no, no se han dejado ver en el último ultrasonido.

Luego de que todos los chicos me saludarán y les presentara a Ignacio —el cual les había caído muy bien — guardamos las cosas que ellos habían traído y empezamos a preparar todo para almorzar ya que Lu moría de hambre.

—Le comentaba a Au, que en mi casa tengo espacio por si alguno quisiera quedarse ahí.

—Si no te molestas Drew y yo podríamos, así Lu puede estar con Au.

Ignacio sonrió.

—Pues son bienvenidos a mi casa.

Pasamos el resto de la tarde entre juegos de mesas, películas, bocadillos y sonrisas. Hacía mucho que no la pasaba así de bien juntos a mi amigos aunque debo admitir que me dio mucha nostalgia el hecho de que Alejandro no estuviese ahí, y creo que mis amigos se dieron cuanta, ya que no solo evitan el tema, sino que trataban de alegrarse cuando mi sonrisa se borraba.

Para la hora de la cena, pedimos pizza y luego de eso toco el turno de cantarle cumpleaños a Lucy y ella lloró, supongo que debido al embarazo sus hormonas aún están un poco desubicada.

Después que Ignacio, Drew y Josh se marcharon, me dispuse a acomodar a Lau y Lu en mi apartamento.

—Pueden dormir en mi cama, yo dormiré en el sofá.

—Nada de eso, Lau dormíra en el sofá y nosotras en la cama —sentenció.

Lau tomó la almohadas y las sabanas y se acomodó en el sofá.

—Aquí estaré más que bien, y bueno últimamente dormir con Lu no es sencillo.

—Cuando tengas una barriga como la mía lo entenderás —protestó.

—Yo también te amo —balbuceó junto a un bostezo.

—Vamos Lu, creo que esta cansado.

Subimos a la habitación y nos acomodamos en la cama.

—Soy la culpable de que Lau no esté durmiendo bien. Me cuesta acomodarme en la cama y no quiero ni imaginar lo que sucederá los siguientes meses.

—Todo va salir bien Lu, puede que sea un poco complicado, pero ese chico está feliz.

—Si que lo está, antes de dormir les habla un montón creo que el causante de que se muevan mucho.

—Es tan hermoso, no puedo ni imaginar lo feliz que se sienten ambos.

—Te extraño Au, ahora no puedo verte tan a menudo, ni salir se compra, por cierto ya empecé a comprarle ropita a los bebés, en colores neutros eso si.

—me encantaría poder estar ahí, para ir de compras y a comer.

—¿Vas a volver algún?

—Sabes que siempre que pueda los iré a visitar.

—No hablo de visitarnos. Au vi a ese chico y esta interesado en ti y se que tratara de que le des una oportunidad y aunque me hubiese gustado que siguiera con Ale, el fue un idiota y no merece que lo perdones, y tu mereces darte una oportunidad con alguien más y me parece que él lo es.

—Ignacio y yo solo somos amigos y bueno si llega a suceder algo aún es muy pronto para pensarlo, y no estoy aquí por un chico lo sabes, Lu recuerda algo siempre seremos amigas, pase lo pase o estemos a kilómetros de distancia siempre serás mi amiga.

Lucy me envolvió en un abrazo y empezó a sollozar y no pude evitar que yo también llorará.
Si había algo que extrañaba era a mis amigas, principalmente a Lucy que era con la que pasaba la mayoría de mi tiempo y con la que me hubiese gustado vivir cada pequeño detalle se su embarazo.

Ese chico es un ¿¡IDIOTA!? [Borrador]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora