Al día siguiente cuando fue a recoger a Minho se topó con la cara de sorpresa de Changbin al verlo esperando fuera de la casa del rubio. Después de unas cuantas miradas asesinas y protestas de incredulidad, habían viajado juntos los tres a la universidad.
Los días habían pasado y la nueva rutina de Jisung lo hacía sentir muy alegre. Ya Changbin se había relajado un poco y soportaba mejor la presencia del chico pero de vez en cuando le restregaba en la cara que conocía a Minho mejor que nadie y esto fastidiaba a Jisung.
Minho por su parte se iba abriendo poco a poco a la presencia de Jisung. Le había contado que sus padres habían muerto sin dar detalles del accidente, también había comentado que era hijo único; por su lado, Minho había escuchado del propio Jisung cosas personales y no podía evitar sentir escalofríos en su cuerpo cada vez que el chico le hablaba.
Jisung había descubierto que Changbin era un chico serio pero justo, desconfiado y sobreprotector con respecto a Minho. El pelinegro era para Minho su única familia, el chico lo ayudaba no sólo en recogerlo, sino que también le llevaba comida e incluso le cocinaba de vez en cuando, le ayudaba con los quehaceres de la casa y hasta le seleccionaba los conjuntos de ropa para cada día, todo eso lo hacía en su famoso día juntos, los domingos. Aunque debía admitir que Changbin era muy bueno, había cuidado impecablemente de Minho hasta el momento sin quejarse, y tenía buen gusto para la ropa, a pesar de que en su mayoría vestía de negro. Claro ésta rutina del pelinegro había hecho que no tuviera amigos más allá de Minho y mucho menos pareja, él se había negado a toda aquella posibilidad solo por su amigo. Jisung lentamente había descubierto que aquello se debía a que el pelinegro se sentía culpable de algo relacionado al accidente pero no había querido preguntar sobre ello. Aún habían muchas cosas ocultas para Jisung, pero él esperaría pacientemente hasta que ambos chicos quisieran hablar con él. Sin embargo, el pelinegro había aceptado que Jisung no era como los rumores decían, debía admitir que el chico era agradable y descubrir que tenían cosas similares los habían acercado un poco pero aún se mantenía atento; también le encantaba hacer comentarios sobre su relación con Minho sólo para ver las reacciones de molestia del chico.
Jisung era un chico poco conversador al que le daban igual las demás personas, ya que sabía que muchos le hablaban por su posición como hijo del rector de la universidad y un joven heredero. Nunca se había interesado realmente en profundizar en las relaciones y solo mantenía las cosas muy superficialmente. La gente sabía que él hacía lo que quería sin refrenarse o meditarlo antes; también, sabían que la única pasión real del chico eran las carreras de autos.
Los padres de Jisung habían desistido de la idea de que su hijo se reformara, desistieron cuando el chico empezó a cambiar de pareja cada mes sin importar si fuera chica o chico. Al inicio había sido duro aceptar aquello, pero al no ver afectividad real, aceptaron que Jisung saliera con quien quisiera pero con una condición, debía ser el mejor promedio de su carrera; y a pesar de que el chico casi no asistía a clase, era inteligente y había logrado mantener muy buenas calificaciones hasta el momento.
Por su lado, Jisung se había acostumbrado a una vida de lujos y máscaras, nada real, nada serio, solo algo pasajero, hasta aquel momento. Era la primera vez que se sentía interesado en alguien más allá de los autos, tan interesado que había cambiado cosas de su comportamiento y rutina con tal de estar cerca de Minho. Y esto no había pasado desapercibido por nadie, los rumores se habían propagado por toda la universidad conforme pasan los días y veían a ambos chicos cerca; pues Jisung no se había conformado con recoger y dejar a Minho en su casa, sino que también ahora se sentaban juntos en clase y durante la hora del almuerzo, y caminaban juntos por los pasillos; Jisung había optado por mandarle mensajes, el único momento donde se separaban era los fines de semana y Minho había hecho prometer a Jisung que no lo seguiría más, el chico había aceptado de mala gana, por lo que los fines de semana pasaba ansioso y solo lograba relajarse participando en carreras ilegales de autos.
Por otro lado, estos cambios en Jisung habían provocado malestar no sólo en sus amigos, si no también en los otros estudiantes de la universidad y estos no habían pasado desapercibidos por alguien, Hyunjin. El chico era amigo de Jisung desde niños, lo conocía perfectamente, conocía lo serio, frío y desinteresado que era, él había estado enamorado de su amigo desde muy jóvenes, pero nunca se había atrevido a decirle por miedo a perder su amistad. No quería que le pasara lo mismo que a las ex parejas de su amigo, él sabía que hasta el momento él era el único que tenía un sentimiento real hacia Jisung, por eso el aludido no lo había alejado de su lado como a los demás. Sin embargo, verlo acercarse a otro chico por voluntad propia y cambiar su rutina diaria solo por otra persona, había sido como una fuerte patada en el estómago. Ya Jisung ni mensajes le escribía, y de vez en cuando cruzaban palabra, todo aquello lastimaba a Hyunjin y el chico solo sentía repudio ante el rubio, odio por haber alejado a Jisung de su lado, ¿qué tenía ese chico que no tenían los demás, ni siquiera él mismo? Pero algo era seguro, Hyunjin no dejaría que un ciego le arrebatara lo que él había construido por años.
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Always
RomanceDespués de un catastrófico accidente, Minho pierde la vista. Por lo que debe enfrentar la vida de una forma diferente. Jisung no ha conocido más allá que las carreras de autos y esta cansado de tener que cumplir las expectativas de sus padres. El en...