Si hubieras estado aquí

Contra reloj

Los generales junto con el señor gordito supervisaban que ambos hombres estuvieran trabajando, lo cual en teoría era tanto cierto como falso. Estaban trabajando para poder huir de ahí.

Hacían todas las piezas por partes, aunque Yinsen se dio cuenta que en cada parte Tony sonreía con nostalgia.

— ¿Qué te hace sonreír tanto? —Se atrevió a preguntarle.

—Esta armadura me recuerda al diseño de Iron Man, el primer boceto.

— ¿Iron Man?

—Era un proyecto de Steve y mío, se suponía que como él era un debilucho y no muy bueno en nada, Iron Man iba a ayudarlo a cumplir su sueño de participar en la guerra, pero cuando recibió el suero y se volvió el Capitán América esa armadura terminó guardad en el baúl de los olvidos.

Yinsen vio como a Tony se le alegraban los ojos al pronunciar su nombre pero al mismo tiempo la nostalgia en sus palabras lo hacía ver que lo extrañaba.

— ¿Por qué no la construiste al final para hombres como lo era Steve antes?

—Porque la había hecho para él.

Fue su única respuesta para luego poder seguir trabajando, por más que la presentaba a todos se les hacía una idea tonta y además, Steve ya no la necesitaba por lo que poco a poco Tony perdió la importancia en ella.

Pasaban los días y los musulmanes se empezaban a dar cuenta que las partes no parecían encajar en la foto que tenían del misil, lo cual se les hacía raro. Sin embargo, no preguntaban pues confiaban en que ambos científicos hacían lo correcto, puesto que si no era así su castigo sería la muerte.

Una mañana un hombre calvo llegó a verlos, Tony de inmediato supo que ese alfa tenía que ser un líder, puesto que su aroma a tabaco era muy fuerte y venía muy bien acompañado.

—Tranquilo. —Dijo en el idioma del millonario, luego se acercó más a él para poder ver su reactor. —El arco y la flecha fueron lo máximo en la tecnología armamentista, hicieron posible que yinyin scan dominará desde el pacífico hasta Ucrania.

El hombre calvo empezó a caminar por el taller, observando todos lo que había en él, agarrando cosas y sin dejar de hablar nunca. Tony y Yinsen solo lo podían seguir con la mirada, un valiente a lo que se aproxima pero el otro temeroso ante el alfa.

—Creó un imperio, el doble de grande que el de Alejandro Magno y cuatro veces el tamaño del imperio romano. —Volvió a acercarse otra vez a Tony. —Pero hoy en día, quien tenga en su poder las últimas armas de Stark, el esposo del gran capitán, es quien domina estas tierras... Y pronto será mi turno.

El hombre se acercó a sus papeles, y los empezó a ver. Tony volteo a ver a Yinsen, ahora si le empezaba a dar algo de miedo pero el otro hombre le dijo que se calmara con un gesto de la mano.

El hombre se acercó otra vez a Stark y volvió a hablar en su lengua natal.

—¿Wanneer sal my raket wees? —Yinsen con voz temblorosa respondió.

—Ons werk, miskien oor twee weke.

—¿Dink u nie dat ons hulle al baie tyd gegee het nie? —El alfa se acercó al otro, le dijo de una forma muy fría, calculando si había un deje de mentira en su respuesta.

—Dit is 'n ingewikkelde missiel.

—kniel dit.

De un momento a otro, unos hombres se acercaron a Yinsen y lo pusieron de rodillas mientras el calvo reía. Tony no necesitaba ser adivino para saber cómo iba a cavar esto si no hacía algo pronto.

—Jy dink jy is baie slim, maar dit is nie so nie. —Dijo el alfa moviendo unas cosas, dejando al visto una piedra roja de lo caliente que estaba. —Ek het hulle gesien.

Yinsen cerró los ojos, maldiciendo en la mente, tuvieron que haber sido un poco más discretos al momento de las pruebas.

— ¿Qué quiere? —Se animó a preguntar Tony al ver que la cabeza de su amigo era volteada para mayor acceso a su cara.

—Hy weet wat gebeur met mense wat vir my spot, sterf. —Dijo acercando la roca caliente a su cara, más específicamente a su ojo.

Tony no lo soporto y empezó a acercarse, cosa que hizo que todos los que estaban presentes le apuntará.

—Qué quiere, ¿una fecha de entrega? —Dijo Tony levantando las manos.

El hombre calvo y Yinsen se le quedaron mirando por un momento.

—Lo necesito. —Terminó admitiendo el millonario. —Es un buen ayudante.

El hombre dejó caer la pieza a lado de la cara de Yinsen quien estaba ya muy nervioso.

—Tiene hasta mañana para montar mi misil. —Termino diciendo el calvo mientras se dirigía a la salida.

Tony no se tomó a la ligera esas palabras por lo cual toda la noche se pasó fundiendo y equipando el Iron Man, si quería salir vivo de eso debía ser más inteligente que ese alfa.

Si yo en mi version que tengo de película no tengo idea de lo que hablan ellos, es justo que ustedes tampoco sepan en la version de este fic :)