Pelea

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Ya en el aire Tony le habló a JARVIS.

— ¿Crees que el reactor soporte esto? —La inteligencia le advirtió que la capacidad del reactor era del 45% y bajando, puesto que ese no era el objetivo del primer reactor.

—Mantéenme informado. —Era lo único que podía decir, debía salvar a la alfa.

Tony volvió a llamar a la secretaria y se alivió que contestara.

—Pepper.

—Tony. —Se escuchaba asustada. —Por dios me da gusto que estés bien.

—Que paso.

—Obadiah enloqueció... —Tony quería darle instrucciones pero la mujer no le dejaba hablar. —Tiene un traje enorme como el tuyo.

—Vete de ahí. —Le repetía el omega pero luego escucho como si de la tierra estuviera saliendo algo o como si rompieran las paredes de algún lado.

Tony escucho un grito y de pronto pudo ver que Obadiah había creado un traje mucho más grande y estaba a punto de lastimar a la chica.

— ¡Hey!—Gritó intentando salvar a su secretaria y logrando que Stane le apuntará ahora a él.

Las balas no le hacían anda por lo que pudo llegar hasta a él y lo arrojó otra vez al laboratorio. Aunque fue demasiado fuerte el golpe que terminó atravesando el lugar y saliendo a una autopista.

A penas se pudo mantener cuando el malnacido utilizó un auto que venía con una familia para intentar lanzárselo encima.

— ¡Bajalos!—Efectivamente, Stane se había vuelto loco.

—Solo es un daño colateral Tony. —Dijo el hombre como si de las finanzas hablará, Tony tenía que detenerlo.

Le pidió a JARVIS que mandara toda su energía al centro del reactor, y con un potente disparo pudo lograr que Stane saliera disparado y el detener el auto para evitar que la familia se hiciera el menor daño posible.

Eran cuatro cachorros y una omega, solo los verdaderos monstruos ponían en juego la vida de niños en vano.

Sin embargo la mujer por el susto pisó el acelerador y por accidente se llevó al millonario con ellos, atropellándolo.

"Eso me pasa por ayudar a la gente." Dijo para sí mismo, su energía ya estaba al 19% y lo acaban de atropellar; era de más decir que le dolía todo el cuerpo.

Stane había vuelto con él, con una motocicleta lo había mandado a volar, a Tony le era difícil ya estar concentrado puesto que se estaba agotando la energía del núcleo y eso era riesgoso, debía soportar un cuanto más sin que se lastimara más.

—Por muchos años te he mantenido omega. —Dijo Stane agarrando a Tony con una mano de los pies y con la otra de su espalda, haciéndolo quedar como si de una tabla se tratase. —Yo hice esta compañía de la nada. —Y lo azotó al suelo, pisándolo repetidas veces. —No permitiré que nada ni nadie me la quite.

Tony estaba cansado, esto lo dejaría en cama mínimo por una semana entera si es que sobrevivía. Cuando Stane le lanzó un mini misil lo mandó a volar lejos, sin embargo, también necesitaba un tipo de energía similar para recargar más rápido su traje.

—Impresionante. —Dijo Tony volando a una altura de él. —Mejoraste tu diseño, pero yo hice lo mismo con el mío.

Stane entonces empezó a volar con su traje, persiguiendo a Tony.

—Señor, parece que su armadura también puede volar. —Tony pensó que por lo grande que se veía todavía no había logrado ese objetivo pero parece ser que se equivocó.

Si hubieras estado aquíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora