Todas las chicas buenas van al infierno

7.3K 632 79
                                    

Desde que soy pequeña tengo el mal hábito de leer la última página de los libros, es lo primero que hago cuando tengo un nuevo libro en mis manos. No puedo empezar a leerlo sin saber como va a terminar. Me gusta saber como va a terminar porque así sé con qué personaje no me debo encariñar, así sé si hay un final feliz o me preparo para llorar. También espero hasta que una serie llega al final para empezar a verla porque no me gusta verla sin saber que va a pasar. Muchos no lo entienden, Ciara siempre se molesta conmigo cuando le hago spoiler sobre alguna nueva serie. Henry siempre solía decir que no tiene sentido leer un libro si ya sabes que va a pasar. Pero tiene todo el sentido para mí. Incluso cuando empiezo a escribir una historia no empiezo por el prefacio, no, yo empiezo por el capítulo final, creo que es la base de todo, creo que todo gira en torno al final. Todos siempre se centran en el inicio pero a veces los inicios no marcan ninguna diferencia, a veces no es el inicio lo que recuerdas, después de cerrar un libro es el capítulo final lo que se queda contigo, es el episodio final de una serie lo que indica si fue buena o mala, son los finales lo que nos preocupa por eso siempre pensamos en los felices por siempre. Es el final lo que importa, pero un final no significa el fin de la historia. Un final a veces es solo un nuevo comienzo, un paso a una nueva historia. Pero no creo que Rafael este listo para abrir de nuevo el libro de su historia con Paula cuándo ya sabe como es el final, cuando ya cree que toda la historia fue contada y él ya puso punto final.

-¿Cómo empezó esto?-les pregunto.

Rafael pasa una mano por su cabello que esta siempre despeinado y me da una sonrisa al estilo Rafael. De esas sonrisas moja bragas, como suele decir Ciara.

-Una noche de copas, una noche loca.-me canta Kate con una sonrisa.- Solo sucedió después de un par de copas y no hablamos de eso, después volvió a suceder.

-¿Desde cuando?

-Cuatro meses.-me responde Rafael.

Cuatro meses es mucho tiempo para alguien como Kate y una eternidad para alguien como Rafael.

-Así que están saliendo...

Un gran no sale de sus labios y empiezan a mover sus manos en señal de negativa.

-No estamos saliendo.-dicen los dos al mismo tiempo.

-No están saliendo, solo tienen sexo.

Ambos asienten con la cabeza.

-Te lo dije no tengo tiempo con la Universidad y mi trabajo a penas y tengo una vida. No quiero una relación ahora.

-Y yo no quiero saber nada más de relaciones.

Amigos con beneficios nunca resulta tan bien. Es jugar con fuego pero si les digo eso ninguno de los dos lo va a entender. Van a creer que ellos pueden controlar el fuego, que saben lo que están haciendo pero no es así.

-¿Puedo hablar contigo?-le pregunto a Rafael.- podemos ir por un café.

Él toma su saco y me da una sonrisa mientras me guía hasta la puerta. Le doy una mirada a Kate antes de salir.

-¿Me vas a seguir regañando?-me pregunta él.- Ella esta grande, sabe lo que hace, ambos lo sabemos.

-No es para hablar sobre eso.

Le digo que me siga mientras camino hasta mi auto. Él va a en su propio auto y me sigue hasta la cafetería que siempre vamos. Cuando ambos estamos sentados en una de las mesas ubicadas afuera de la cafetería y con una taza de café en las manos lo miro sin saber exactamente como decirle que acabo de ver a su ex prometida.

Por favor, no digas que me amas ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora