Capítulo 8- ¿Yo celoso? ¿Y de ti?

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Los nervios los tenía de punta, a mis padres no les gusta que esté hablando del pasado y si ellos llegan a saber que tengo un álbum de fotos no puedo ni imaginarme lo que me podrían hacer

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Los nervios los tenía de punta, a mis padres no les gusta que esté hablando del pasado y si ellos llegan a saber que tengo un álbum de fotos no puedo ni imaginarme lo que me podrían hacer.

Jacob estaba parado frente a mi algo confundido.

—¿Miley?, ¿Que estás haciendo?.

Suelto la respiración, creí que era mamá, espero que Jacob no se lo cuente.

—Hola Jacob...—bajo la mirada algo triste por mis pensamientos.

Él se acerca algo preocupado, y se sienta sobre la cama toma mi rostro con sus manos.

—¿Estás así por lo que sucedió hoy?, no te preocupes ¿si?, yo me encargaré de hablar con Adam.

—No, no es Adam, ¡es esto!—lo miro con los ojos llorosos y levanto las manos señalando el lugar, el parece no entender lo que digo,— Yo parecía feliz en Alemania, hemos estado por casi todo el mundo —Suspiro y cierro los ojos— Jacob lo único que quiero es ser feliz, y a mis padres no les importa en lo mas mínimo.

—Trozo de pan...—Jacob me llama y abro mis ojos— Sabes que cuentas conmigo para lo que necesites, quiero que me veas como tu amigo, y eso incluye que me cuentes a donde vas y con quién. Estaré así te estes ahogando de nuevo.— Suelta mi rostro y me da un abrazo.

Me rio un poco, Jacob es del tipo de persona que le da color a los días grises, aunque cuando está en Modo Protector me exaspera.

—Gracias de verdad,  no se que haría sin ti si llegan a despedirte —Le doy otro abrazo.

No soy tonta, se que Jacob puede perder su trabajo por mi pequeña aventura con Ángel. Me separe un poco y lo veo sonreír.

—Probablemente ahogarte de nuevo.—estallamos en risas los dos.

—No sabía que habías vivido en Alemania, Cuéntame...—hace pucheros.

Jacob es demasiado tierno, no me podía negar, y aparte me hace falta desahogarme un poco.

—Bueno,  nací en Alemania, viví la mayor parte de mi infancia en Dortmund, pero recuerdo muy poco, por no decir nada —Me acomodo mejor para ver a Jacob — Esto lo sé por mi acta de nacimiento y porque tengo vagos recuerdos de la ciudad.

—Pero... ¿Por qué? ¿Como puede alguien olvidar su infancia? Eso es terrible.

—Lo sé —Suspire frustrada —Tengo una teoría...

—Cuéntame, te escucho—Dijo Jacob entre cerrando sus ojos con curiosidad.

—Bien, Después que me insertaron el chip GPS a los 6 años—Suspire—Mis recuerdos son escasos, entonces eso me deja suponiendo que lo olvide por causa del chip y...

— Espera espera, ¿A los 6 años? —me interrumpió —tus padres están locos —Abrió los ojos como platos —Sabía que no vendría a trabajar con una familia normal, Adam me lo advirtió, dijo que no hiciera preguntas sobre los Señores Stone, pero es una locura están jodiendo tu vida.

Entre las Sombras ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora