Conociendo a los merodeadores (Sirius Black Y Casidi Potter)

Capitulo 35 - Un Baile parte 2 -

Casidi salio del baño mucho más relajada, soltó aire y se dijo que ahora podría volver a bailar tranquilamente con sus amigos y con Regulus pero antes de caminar unos metros de la puerta de los baños alguien apareció y la tomo de la mano para jalarla al lado contrario de el gran comedor

Identificó enseguida la espalda y cabello de Sirius

-¿Sirius que estás hacien....?-

El chico voltio repentinamente y antes de dignarse en dejar que terminara de hablar estampó su mano sobre su boca, se acercó muy peligrosamente a su rostro y susurro

- Solo sígueme - para volver a arrastrarla

No supo por que no impidió o dijo nada después de eso, sentía que lo que fuera que Sirius tratara de hacer era importante haci que se dejó guiar por los pasillos, sus tacones resonaban por el lugar al igual que los fuertes pasos del chico, estaba agitado y muy concentrado por lo que no escucho cuando otras pisadas sonaban a unos metros de ellos

Lo tomo con fuerza y lo empujó a una clase vacía esta vez ella puso su mano sobre su boca y le pidió silencio, ambos escucharon como alguien pasaba afuera del aula pero para su suerte seguía de largo

- Fich - dijo Casidi retirando con cuidado su mano de los labios de Sirius

Se recargo en la pared soltando aire y estando tranquila de no haber sido vista por el conserje pero para su sorpresa sintió como Sirius tomaba su nuca y con fuerza la empujaba adelante estampando sus labios contra los suyos

Fue tanta la rapidez que no se retiró de inmediato, sintió los dulces y fríos labios de Sirius sobre los suyos, una corriente cálida la inundó, sus mejillas se calentaron, un nerviosismo apareció en sus piernas, sentía que en cualquier momento caería, ambos sentían las respiración del otro, escuchaban sus corazones palpitar con rapidez y sin ser consciente Casidi cerró los ojos al igual que Sirius y le respondió el beso

Sus labios se movían al compás, estaban sincronizados y era como si dos piezas de rompecabezas encajara perfectamente, Sirius sintió algo que jamás había sentido, era un beso diferente, era como si le robara el aire, como si derrepente la gravedad no existiera una energía le recorría al cuerpo desde los puntos en los que Casidi lo tocaba, y Casidi tenía la mente en blanco no recordaba que Sirius era el amigo de su padre, no recordaba que Sirius era su tío ni el padrino de su hermano ambos tenían el sincero deseo de no parar, ambos tenían la necesidad de seguir de ese modo hasta el cansancio, hasta que sus labios quedarán hinchados y sus bocas se aburriesen

Pero cuando sintió que Sirius tomaba con una mano su mejilla y con la otra acercaba más su rostro a el de el fue consciente de la situación, abrió los ojos con sorpresa y coloco sus manos sobre el pecho del chico para empujarlo hacia tras

Sirius se separó por la sorpresa y ambos respiraron agitadamante

- No...No... - empezó a repetir mientras se llevaba una mano a la boca y negaba con la cabeza, había recordado quién era Sirius había recordado que era él de ella
- No puede ser, no puedo creerlo, soy una tonta - estaba asustada y en shock, el arrepentimiento la invadió al igual que el miedo

- Lo lamento - dijo Sirius quien estaba extrañado de que fuera tan negativa - Pero no e podido evitarlo -

Casidi que recobro su conciencia, se enderezó y miró a su amigo con enojo ya que él había sido el principal culpable

- ¿Pero que te sucede? -

- No se lo que ha pasado pero no puedo evitarlo - trato de excusarse

- Eres mi amigo Sirius esto.... - no podía ni decir que fue un beso, sentía sus mejillas arder nada más de pensarlo  - Lo que has echo está mal muy mal -