Y estoy aquí, de pie frente a ti, queriendo expresarte todo lo que siento. Y es que no tengo ni idea del porqué de este sentimiento, no hay motivo por el cual tenga que haberme enamorado. No sé por qué, es algo tan inexplicable, pero no puedo dejar de mirarte, porque he hallado en esos ojos mi felicidad, porque en tu sonrisa he descubierto un sol que hoy en día me ilumina, y para mí ahora eres la personificación de la perfección, con todos tus defectos y virtudes. Me he enamorado de la forma en la que ríes, de tus locuras y ocurrencias. Te quiero, y aunque no hay razón para ello, lo hago.
