Conocí el vicio al desembarcar mis penas en tus labios,
era dulce tu veneno que me mataba a fuego lento,
y su primera víctima no fui yo, sino el tiempo,
por su envidia de vernos contentos.
Besé tus heridas para no verme en unas nuevas,
pero no pude lograr que un "adiós", no me dijeras,
ahora lloran mis inviernos, por ya no verte en primavera,
y me desvelo en las noches pensando en un "hubiera".
Abrí la ventana por sí tú volvías,
sin saber que en tu cielo ya no entraría,
volaste con dirección a otro rumbo,
Y yo sin ti, sin norte, como un vagabundo.
No hay boca en la que no escuché tu voz,
quiero correr de tu recuerdo, pero es más veloz,
quiero sumergirme en el silencio que me has dejado,
Si no te veo volver, es porqué quizá éste me haya ahogado.
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Versos a la nada
Poesía¿Han sentido la necesidad de escribir lo que sientes cuando la persona que querías se ha ido?. Yo sí, y sé que esa persona no leerá lo que le he escrito, de ahí viene el nombre de éste poemario, porque el destinatario es la nada. Quizá no contenga...
