Sueños.

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Tu sueño; una casa y un lindo jardín,
el mío: poder ser de tus labios el carmín;
tener un auto que funcione con mi latir,
por si en tus sueños tenía que conducir.

Odié al tiempo junto a tus excusas,
besé tu sombra para que te mostraras,
pasé por el frío viento en tu penumbra,
y recordé tu mano sanando mis heridas.

Te había prometido un cielo,
y lo más alto que he llegado,
es tocar una nube en tus labios,
que ya quisieran mil diablos.

No cumplí con llevarte a Bruselas,
pero te he escrito un ciento de poemas,
las almas sin frontera se miran donde sea,
si tu corazón vaga, recuerda que hay lugar en mi parcela.

Versos a la nadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora