Feria Medieval

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Fuimos en tren, Raquel siempre decía que ir en coche al centro era una pérdida de tiempo. Aparte de no encontrar aparcamiento, el tren y su vaivén le relajaban. Eso y el paisaje, ya que los raíles pasaban muy cerca del puerto, y ella adoraba el mar, era una auténtica soñadora..

-Pasó algo ese día Sara?, le interrumpí yo..
-Deja que te explique bien Javier, y sus ojos se llenaron de lágrimas.
Sería la última vez que la interrumpiría...

Llegamos a la estación Central, y Raquel agarró mi mano, íbamos muy felices, porque ese día iba a ser sólo para nosotras. A estas alturas yo ya sabía que ella se veía contigo Javier, "con su cuerpo de policía" como te llamaba ella jaja, pero ese día sólo estábamos ella y yo..

Llegamos a la plaza España. Había unos carteles que indicaban que era fiesta Mayor, justo en el barrio Gótico.

-Mira Sara, mercado medieval! Vamos ahí, seguro que acabo comprando alguna cosa que luego no sé donde guardar..

- Vale, dije yo.
Las ferias artesanales para nosotras tenían mucho valor, una vez participamos en una, vendiendo pulseras y adornos hechos por nosotras y sabíamos todo el trabajo que había detrás de ello.

Fuimos andando hasta el barrio Gótico, contándonos cosas de mujeres Javier, tú ya me entiendes, pero nada raro, ella se sentía feliz a tu lado.

Y no pude reprimir las lágrimas, abracé a Sara como un niño pequeño y ella me dijo... - Contínuemos.

Llegamos al principio de la feria. Era interesante porque todos se habían vestido de la época. Parecían auténticos caballeros y doncellas. Fuimos viendo puestecitos, tras puestecitos.. Hasta ella compró un libro..

-Qué libro Sara?

-Pues no sabría decirte Javier, quieres que vaya a buscarlo? Vamos los dos. Continuaremos a partir de este punto en cuanto lo tengamos en nuestras manos.

Lluvia de Diciembre (Terminada) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora