IMAGINAS CON BILLIE EILISH

"La peli-azul"

- Debes ser realista ___, no podrás mantener este juego a escondidas con esa chica por mucho tiempo. - Eliana la regañó por 3ra vez.

- Eli, durará lo que tenga que durar - respondió la castaña aguantando una risa pícara.

Cuando desvió la mirada de su amiga, sus ojos se cruzaron con quien le había estado robando el aliento las últimas semanas, quién, por cierto, parecía haber estado esperando que notara su presencia, pues en cuanto sintió su mirada le regaló una sonrisa fugaz, seguido de pararse de su mesa, escanearla una última vez y salir del comedor con aires de triunfo.

- Espérame, ya vuelvo - soltó ___ apurada, sin despegar la mirada de por donde había desaparecido ella, su "objetivo".

- No! no me quiero qued..- intentó detenerla, pero fue inevitale - quedarme sola. Gracias ___ - terminó su frase con un suspiro.

Tras salir y no divisar a la peli-azul por los pasillos, sintió cierta frustración. ¿No la había esperado? Bajo esa pequeña decepción, re-acomodó un poco el tirante de su mochila sobre el hombro y se encaminó al baño más cercano, donde dejó caer aquella mochila y no alcanzó a hacer mucho más cuando la tironearon hacia uno de los cubículos.

- Por un momento pensé que no me habías entendido - dijo, con su voz semi-ronca, mientras terminaba de cerrar la puerta. Era ella, Billie, la peli-azul que ya tenía días robando a la castaña para ocultarse por ahí con ella.

___ no tuvo tiempo ni de contestar, cuando los labios de la peli-azul se habían estampado en los suyos, haciendola retroceder ligeramente hasta una de las paredes del cubículo, siendo acorralada por la ojiazul y la pared. Sus labios eran suaves, y podría decirse que sus besos eran tiernos, de no ser porque tarde o temprano (en su mayoría temprano), tomaban cierta intensidad, cierto deseo que delataban que para Billie esos besos tiernos e inocentes no eran suficiente. Esta vez fue ___ quién mordió el labio inferior de la otra, provocando que un pequeños jadeo salga interrumpiendo el contacto de sus labios y pocos segundos después Billie hiciera presión en la cintura de la castaña, clamando por más cercanía. Sus besos, ahora más intensos, bajaron delineando la mandíbula de de la castaña, para llegar a su cuello, transformándose en besos húmedos, dejando indicios de lo que más tarde se transformarían en un par de marcas.

- Es.s.espera - intentó hablar bajo el trance de los mimos de la peli-azul, quién, molesta por saber lo que se venía, soltó un "shh" frunciendo el ceño para luego morder el labio inferior de la castaña, subir una de sus manos a su cuello para profundizar el beso y volver a su tarea en el cuello de ___, bajando su mano del cuello, esta vez, dándose el placer de que sus dedos recorriera su cuello, clavículas, pecho y abdomen para volver a terminar en su cintura a modo de "atrape".

- No nos van a encontrar - habló antes de que ___ intentara detenerla una segunda vez - no nos van a ver - continuó explicando sin dejar de recorrer el cuello de la chica - no nos van a oir - succionó intencionalmente, provocando jadeos en ambas - porque no vas a hacer ningún ruido, bonita - finalizó volviendo a esos suaves labios que parecían ser la nueva adicción de Billie.

Aun que no lo admitiera en voz alta, ___ amaba que Billie la tratara de esa forma. Amaba la sensación de saber que su cuerpo seducía a la peli-azul y, en cierta forma, que la peli-azul siempre encontraba la oportunidad de clamar lo que quería como suyo.

Las manos de Billie se habían posicionado bajo la ropa de ___, haciendo erizar la piel de la castaña a medida que sentía el tacto de la chica, deleitándose al recorrer toda su espalda, mordiendo y succionando los labios de quién consideraba su propiedad. Fue entonces que el celular de ___ interrumpió todo.

- un segundo - murmuró la castaña, haciendo distancia para salir y buscar su celular en la mochila que, momentos atrás, había quedado olvidada en alguna parte del suelo. La peli-azul rodó los ojos y la siguió fuera del cubículo, observando todos sus movimientos, observando una y otra vez su cuerpo, preguntándose qué tenía ella que simplemente no podía ignorar su presencia. - Uhum? - contestó la llamada intentando no chocar miradas con Billie - No, es decir, tal vez en la tarde - habló soltando una sonrisa, despertando los celos de Eilish ¿Quién era y qué quería? No importaba, todo lo que le interesaba es que quien fuera, no iba a tener oportunidad con ___. Así que caminó hasta "su" castaña, la abrazó por detrás rodeando su cintura, apartó su cabello hacia el lado que atendía el celular y, sin aviso, empezó a dejar besos en el cuello de ___, haciéndola perder la concentración de su llamada telefónica - para - le susurró ___ en un intento de mantener su cordura, sin embargo eso no estaba en los planes de Billie Eilish. - N.no, no era con.tigo mm, ¿ha.ablamos más tarde? - sus palabras salían inevitablemente entrecortadas por culpa de quien parecía divertirse robando la concentración de ___.

"___ te estoy hablando, ¿hola?" se escuchó desde el aparato, pero ___ no podía contestar, no ahora que una de las manos de la peli-azul jugaba entre su cadera y muslo, amenazando con tocar su entrepierna. "¿___?" - ¿sí? - intentaba reunir fuerzas para ignorar el tacto de su compañera - Estem, te llamo después - las palabras salieron casi chocándose entre sí, intentando ocultar los jadeos. Cortó apresurada y en cuanto dejó el celular, Billie detuvo su juego. - ¡Qué te pasa! ¿Estás loca? - su reproche no sirvió de nada, pues Eilish le regaló una sonrisa burlona, le robó un beso lento y se dispuso a salir del baño, no sin antes soltar un "me encantas" casi inaudible y regalarle un giño.

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muy largo? muy corto?