Jungkook estaba acostado en su estudio allí había dormido desde que Yuri había llegado al castillo.
Ese día había hablado con Namjoon para ver lo del negocio que habían echo hacía 5 años atrás, no había recordado hasta que le dijo a su amiga.
Tambien había ido a cabalgar con Hoseok, él era el encargado de su armada así que tenían muchas puntos que organizar.
Y luego había ido por Sunoh.
Desde el día que le había dado el beso a Yuri había sentido el cambio en Jimin, le había dolido.
Su dolor era el suyo.
Por un lado estaba su instinto que le decía que lo abrazara y que le dijera que no le quería hacer daño pero por el otro estaba su orgullo que le dictaba que estaba haciendo lo correcto.
Todos los días lo había visto más triste. Eso era un tormento. No quería ya sentir su conexión, quería que se fuera para que cuando menos fuera esta se hiciera menos intensa.
Había cambiado su horario de correr, ahora lo hacía por las noches, cuando el Omega ya estaba es su cabaña, daba vueltas demasiado lejos para él lo pudiera oler pero cerca como para que Jungkook sintiera que lo estaba protegiendo. Siempre a lo lejos pero eso calmaba esa necesidad de abrazarlo.
Su aroma cambiaba de intensidad conforme el viento se movía.
Solo un par de horas bastaban para que él se relajara y pudiera llegar a su ahora recámara improvisada y poder dormir.
Deseaba con intensidad que él se fuera. Pero estaba Sunoh de por medio.
Esa noche había visto rastro de lágrimas en su rostro, le había preguntado a Sunoh y el había confirmado sus sospechas, le dolía su dolor.
Esa noche se había acercado más a su cabaña.
Se sentó en cerca de un árbol y pudo sentir su dolor. Solo se había recostado en forma de lobo hecho una bolita y allí había esperado que él se durmiera para que no sufriera.
Y lo hizo una hora más tarde, cuando casi la media noche llegaba.
El día siguiente hablarían con él, Yuri ya estaba impaciente y el también quería ver si cara de sorpresa cuando supiera que había sido engañado.
No sabía que es lo que sentiría a lo mejor volvería a andar detrás de él o bien siempre decidiera irse de una vez por todas.
No le importaba.
El no quería tener un Omega y menos uno tan.. tan.. empalagoso como él. Le gustaría tener un lazo con un Omega como Yuri que era racional en todo momento y que no se dejaba guiar por sus emociones.
Odiaba todas las veces que el lo atormentaba con sus frases cursis, siempre tratando de llamar su atención, siempre sonriendo.
Tan solo tenía 15 años cuando se había mudado hacia su castillo y desde entonces no lo había dejado de acosar en todo momento, cuando se casaron su padre lo amenazó con quitarle su derecho al trono si no lo trataba bien, pero cuando su padre murió y él se volvió el rey dejo salir su verdadero rechazo hacia el Omega.
Lo había llegado a golpear para que lo dejara en paz. Pero a él no le importaba el en verdad estaba empeñado en enamorarlo a como diera lugar.
Pero todo cambio cuando probó su cuerpo, su bello y hermoso cuerpo, en su primer celo estando casados, el había disfrutado de toda una semana de sexo complaciente, soportando las ganas de marcarle, su naturaleza le pedía que lo hiciera y el Omega también pero el sabía que aquello solo empeoraría las cosas. Así que no lo hizo nunca.
Pero al dejarse llevar por sus instintos su lobo y el del omega se habían conectado. Se reconocieron como una pareja.
Y desde esa vez no pudo volverlo a tocar, no podía insultarlo, lo único que hacía era ignorarlo y eso el omega se lo había tomado como un indicio que el lo empezaba a aceptar. Pero no podía estar más equivocado. El sintió más que hartazgo y cansancio de su constante ruego.
Los papeles del divorcio habían estado listos desde hacía 5 años atrás, pretendía que los firmara cuando regreso del viaje con Namjoon pero el omega estaba en celo. Así que solo tuvo que esperar todo este tiempo para que su plan de ser libre de él se hicieran realidad.
Durante el tiempo que había estado en cautiverio se preguntaba donde estaba él y por qué no había ido su rescate.
Se sintió defraudado y engañado.
Todos estos años sintio que su omega lo había dejado en el olvido, su lobo alfa ya no lo quería, ya no.... o eso era lo que él pensaba.
Ahora se la pasaba horas en el bosque esperando que el omega dejase de llorar y se durmase.
Solo quería que estuviera lejos así como lo estuvieron cinco años sin saber uno del otro, así de lejos, así de separados, asi que el lazo se pierda por la distancia.
Eso quería.
Pero Sunoh necesitaba de él y Jungkook necesitaba de Sunoh.
Tantas vueltas al mismo tema una y otra vez.
Cerró los ojos y pensó en sus primos, alguno de ellos era el culpable, se sentía en peligro de nuevo, pero esta vez estaba preparado. Con la ayuda del hermano de Yuri habían infiltrados guardias de su propia armada para que no cayera de nuevo en una redada.
Protegían secretamente a Sunoh y a Jimin.
Asi que si mañana Yuri conseguía suficiente información podrían encontrar al traicionero.
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Ese lobo que se sienta y espera que su omega duerma 😏😏
Gracias por leer 🥰🥰
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Cuando el amor espera.
Ficção HistóricaJungkook alfa rey que todo el mundo lo cree muerto desde cinco años atrás... escapó de su cautiverio, regresa a vengarse de sus enemigos y a recuperar su reyno pero no ha reclamar a su omega Park Jimin, a él no le interesa y menos cuando se entera...