How to feel? [HyunIn]

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HyunJin estaba enfermo, todos sabían aquello y nadie más que él lo recordaba constantemente, se torturaba cada segundo de su existencia con las palabras "Insensibilidad al dolor" lo que para muchos sonaría como algo increíble pero la realidad era completamente otra, la realidad era algo que quemaba por dentro a HyunJin todos los días.

Desde que el delgado chico tiene memoria ha vivido con aquellas palabras pegadas en su frente y ha sido completamente aislado de una vida normal; clases en casa, cubierto de pies a cabeza para no contraer ninguna enfermedad, no relaciones cercanas al menos de que fueran permitidas por sus padres, escaso contacto físico, visitas mensuales al hospital.

El no sentir nada de dolor físico era un maldito dolor de culo para aquel, en algunas ocasiones el chico intentaba ver si podía sentir algo ocasionandose varias heridas en distintas partes de su cuerpo, pero nada había sido efectivo entonces en sus diechiocho años de vida, intentaba buscar algo positivo en todo aquello, pero parecía que nada lo era.

Con dieciocho años, HyunJin sólo tenía dos amigos y esos eran su hermano; JinYoung, que siempre ha estado ahí para el de manera incondicional y su primo; ChangBin, que vivía con el desde que tenía memoria y era lo más cercano a un mejor amigo que tenía, pero por muy cruel que sonase, todo eso no era suficiente para el joven de dieciocho años.

Con dieciocho años, aquel no había experimentando ninguna de las cosas que un joven de su edad haría a excepción de una cosa: enamorarse.

Hwang HyunJin se había enamorado a corta edad, para se exactos se había enamorado hace dos años del ser más perfectos que se había parado sobre la tierra (Según el) y el cual tenía por nombre: Yang JeongIn, un chico tan solo un año menor que el y que era tan jodidamente adorable que desde el momento en el cual cruzó la puerta cautivo por completo su corazón, pero ese era un secreto para todos a su alrededor.

JeongIn era un estudiante de la escuela a la cual ChangBin asistía anteriormente, al cual el mencionado le habían encargado de darle clases particulares a cambio de algunos puntos extras, el más bajo había aceptado sin dudarlo y habría llevado a JeongIn con el, pero conforme pasaba el tiempo y el mayor se había graduado del instituto, los hermanos mayores de JeongIn le habían ofrecido un poco de dinero extra a ChangBin a cambio de que se quedase como tutor privado de su hermano, el más bajo término por aceptar aquel trato.

Pero el de hebras oscuras se había tenido que resignar a tan solo mirarlo a la distancia debido a que se le había prohibido tener contacto innecesario con aquel niño tan solo por dos cosas, una era su propio bienestar (como siempre) y lo segundo era que el no era alguien con lo cual el pequeño se pudiese relacionar o eso era lo que solían decir sus padres, pero eso no había evitado la curiosidad del pálido y cada vez que este tenía la oportunidad se escabullía para escuchar las clases de ChangBin con ello tomarse el tiempo para admirar al más joven de los tres.

Claro que aunque quisiera no habría podido evitar el contacto obsoleto de JeongIn, después de todo el más bajo se la había pasado rondando por su casa yacía dos años y algunas veces había tenido que cruzar miradas con aquel, incluso una que otra palabra que salía torpemente de sus labios y alguna que otra  reverencia en señal de respeto, pero no había nada más que eso en aquella "relación" que tenían.

Hwang pensaba que iba a ser así por el resto de su miserable vida, hasta que el algún punto se dio cuenta de que no quisiera que fuese así y que al menos antes de que muriese por cualquier razón: tenía que hablar con Yang JeongIn y no con el Yang JeongIn de sus sueños, si no el Yang JeongIn real pero lo haría poco a poco.