The German (Adaptada)

Capitulo 13

Julian

Llego a Berlín después de un largo día de pensamientos. Estoy decidido a ignorar lo que sea que haya sentido por Oriana. Aunque  muero de angustia por saber si tomará el reposo como se lo mandó su doctora.

Anne me recibe con un fuerte abrazo, ya la extrañaba.

-¡Cariño! Pensé que te quedarías más días...

-Lo sé Anne pero ya te dije iba sólo a trabajar...sólo a eso- lo último no se si se lo digo a ella o a mí mismo, Anne parece notarlo y pregunta:

-¿Ha pasado algo cariño?

-No. ¿Qué más que leer documentos hasta morir de trabajo?

-Humm. Julian, te conozco de toda tu vida, creo a veces que te conozco mejor que a ti mismo. Pero está bien...cuentame cuando quieras, aquí estaré, esperandote y te escucharé.- sus palabras calman un poco mi ansiedad, ya me siento más tranquilo, pero tampoco puedo contarle porque necesito aclarar bien mis ideas.

-Bueno Anne creo que has ganado y ya tomaré unas pequeñas vacaciones, pero, estaré aquí. En casa. No viajes. Ni nada de cosas raras y extravagantes.- sus ojos se abren inmediatamente de la sorpresa. Sabía que no se lo esperaría, la pobre me ha pedido ciento de veces que descanse y solo asiento sin hacerle caso.

-¡Vaya! ¿Qué fué eso que te paso en ese viaje?- Sonrío al pensar en Oriana, y siento una nostalgia .

-Nada. Sólo trabajo mi Anne -le beso la frente y subo a mi habitación, tomo una ducha y luego me siento en mi cama, tomo mi laptop y aviso a mi secretaria que suspenda mis reuniones y demás asuntos para después de dos semanas. Sin embargo termino de leer algunos informes y le mando varios trabajos extras a mi ayudante. Si, tengo una secretaria, y un ayudante, él es Mario, por cierto muy buen amigo, sólo que a veces en su plan de galán de Hollywood le cae mal a las mujeres, pero le gusta trabajar ayudándome siendo mi personal de confianza para leer archivos e ir a juntas a las cuales no quiero asistir.

Al apagar la laptop me encuentro nuevamente pensando en ella, en cómo estará. En si ella pensará en mi...en nuestro beso, suspiro y cierro los ojos para recordarlo, sus labios suaves encajaban perfectos con los míos, inmediatamente abro mis ojos y froto mis manos sobre mi cara. No debo pensarla, ni pensar en ese beso.

Me siento un traidor. Abro una cajita que tengo en mi mesa de noche, de allí saco una foto, donde estamos ella y yo el día que le pedí ser mi novia, y le juré cuidar sus sentimientos. Era nuestra foto favorita. Sonrío al recordar a mi Kathrin , con su bella sonrisa y su hermosa melena rubia, sus ojos celestes llenos de luz y amor por la vida. Sin darme cuenta una lágrima cae por mi mejilla, me la limpio y le hablo a la foto como si ella pudiese escucharme..

-Perdón..perdón..te juro que te amo, que siempre te amaré. Perdóname por sentirme así..yo.. Yo no sé porqué lo hago, es involuntario, sólo lo siento y yo...nunca he querido fallarte Kat tu sabes que no -rompo en llanto. En uno silencioso y doloroso, pocas veces me permito quebrantarme. Pero está bueno llorar y dejar ir emociones. Te liberas un poco, aunque después él mismo sentimiento te ataque.

Miro la foto y la vuelvo a colocar donde estaba guardada. Kat era joven cuando me conoció, estabamos en la misma universidad y me atrajo algo de ella que no sabía qué era, nos convertimos en amigos y poco despues moríamos de amor el uno por el otro. Muchos pensaron que era precipitado, que apenas nos conociamos, pero sentiamos que nos conociamos desde toda la vida.

Nuestros años de noviazgo fueron los mejores, yo ya estaba planeando pedirle matrimonio, pero algo inesperado nos ocurrió. La compañera de Kat la hayo tirada en el piso del baño. La llevaron inmediatamente al hospital y lograron estabilizarla.

Fué un susto horrible, llegue a su habitación y ella me sonrió, tome su mano y la besé en la frente, luego me dijo algo que nadie quiere oir de un ser amado: me estoy muriendo.

Le diagnosticaron una enfermedad extraña en el corazon, que estaba avanzada y terminaria por debilitarla, pronto hacer cualquier cosa la cansaría .

Decidí llevarla a mi casa así podría estar con ella todo el tiempo posible. Al principio fué fácil, seguiamos con las bromas, a ella le encantaba esperar por mí para desayunar, en ese tiempo ella hablaba mucho, sobre música, libros, y películas .

Le pedí en varias oportunidades que se casara conmigo, me dijo que no...Que "guardara el anillo para la afortunada". Así decía ella.

Un día baje para desayunar como siempre,y la veo esperando por mi. Sólo que esta vez esta con nuestra foto en sus manos y sus ojos cerrados, está pálida. Al tocarla me doy cuenta que su piel está fría, grito su nombre desesperadamente y Anne llama al hospital. Al llegar la ambulancia no hay nada más que hacer. Vuelvo a escuchar ese pitido de las máquinas que anuncia que su corazón ya no late y despierto alterado, abrumado. Era un sueño. No sé en qué momento me quede dormido y comence a soñar toda nuestra vida juntos.

Reviví lo que pasó hace unos años atrás...debe ser porque hoy estado pensando constantemente. O quizá Kat quiere que mis pensamientos sólo sean para ella y me dió una señal...

Ya tomé una decisión. Me olvidaré de esa chica de ojos verdes y piel de porcelana, de labios carnosos y suaves, de cabello liso y rebelde.

Aquella que me hizo olvidarme de quién era en un minuto y borró todos mis problemas en un segundo.