Julian
No puedo esperar más por verla vestida de novia, por fin podré darle al anillo a la mujer indicada, sin que ésta me lo devuelva, muchas veces lo intente con Kathrin pero ella insistió en que lo guardara para la correcta, y no me cabe duda que la única que podría llevar ese anillo es Oriana. Han pasado solo unos días del incidente que pasó con mi Anne, pero ya se encuentra mejor, no puede viajar con nosotros pero está hasta más emocionada que yo, a veces hasta la tengo que reprimir para que no le de más pistas a Ori, mañana partimos a España y ella no sabe lo que le espera en nuestra estadía allá, cada vez que tocan el tema, yo afirmo que nos casaremos dentro de mucho, para que no sospeche nada de lo que estoy planeando hacer.
He llamado a mi amigo Mario para que se haga cargo de la empresa mientras me voy de viaje a España.
-¿Mario?
-Dime, Serrano..-su voz suena un poco ronca.
-Necesito que te quedes a cargo, mientras voy a hacer algunas cosas en España..-un grito de sorpresa me sorprende.
-¡Vaya, no lo puedo creer! la española te ha cautivado..
-Cállate.-ruedo los ojos, siempre ha querido buscarme pareja pero nunca lograba nada. Así como me presentaba mujeres, así mismo terminaban con él antes que conmigo. Admito que nunca me di la oportunidad de conocerlas, pero con Ori todo ha sido tan diferente, ella me ha tenido en sus manos y volteó mi mundo patas arriba, me ha hecho sentir tantas cosas buenas en tan poco tiempo, cosas que no creía que volvieran a florecer. Mario está en lo cierto, la española me ha cautivado...si así se pone porque le digo que voy de viaje nuevamente a España, no quiero imaginarme su bullying cuando se entere que tengo planes de boda...se pondrá insoportable, pero que más da, ha sido uno de los pocos amigos que aún me aguanta.
-Es que es increíble, la llevas al trabajo, la presentas como tu novia, faltas a trabajar, y ahora te devuelves con ella...de haberlo sabido, te hubiese buscado una española hace mucho...-ahora si está acabando con mi paciencia, hago un bufido y parece notarlo.
-¿Ya terminaste?¿Cuento contigo?-digo para terminar nuestra charla.
-Está bien amigo...sabes que si..suerte, y si puedes, consígueme una también...-eh? ¿una que? me he perdido.
-¿Cómo dices?
-Una española con quien pasar cada uno de mis despechos..-dice con un tono de risa, él nunca cambiará, es un mujeriego sin control, y yo pues he sido todo lo contrario. Quizá por eso somos amigos, aunque no pensamos igual, respetamos nuestros puntos de vista y tratamos de hacer lo mejor por ayudar al otro. Aparte de que siempre nos decimos las verdades sin filtro.
-Pronto la buscarás tu solito....-cuando vayas a mi boda, idiota.
-¿Qué?
-Nada, haz tu trabajo, y cualquier cosa te comunicas con Phillip con respecto a la salud de Anne, hasta luego imbécil.-cuelgo sin dejar que me conteste.
-Cariño...-la voz de Anne me sorprende y volteo para verla, ya tiene mucho mejor semblante que esos días donde fué internada, poco a poco vuelve a parecer la misma de siempre, aunque ya no pueda hacer mil cosas a la vez como está acostumbrada a hacer. Me acerco hacia ella y le doy un suave beso en la frente mientras la rodeo con mis brazos.
-Dime, preciosa...-me da un pequeño golpe en el brazo y se separa de mi, para poderme mirar a los ojos.
-Que tonterías estas diciendo...ya estáis delirando...a la que tienes que decirle eso es a otra...-ríe y me regala una mirada cómplice - Julian, mañana se van a España, y no se cuando volverás, después de la decisión que habéis tomado- sus ojos empiezan a cristalizarse, pero una sonrisa viene con eso- estoy...tan orgullosa de ti...-pone sus manos en mis brazos, haciéndome sentir como si fuese un niño otra vez, a punto de ir a su primer día del colegio- quiero que sepas que, lo es, Oriana es la correcta, espero que la sorpresa salga como lo planeaste...¡ay cariño! va a parecer de película eso que me contaste...-reímos los dos, un pequeño nudo se aloja en mi garganta.
-Me encantaría que estuvieses...sabes que yo..
-Está bien, solo es la pedida de mano-me corta, y mueve sus manos de arriba a bajo para tranquilizarme, se ha dado cuenta antes que yo, de que me estoy poniendo nervioso, y eso que aún no llega el día.- el día de tu boda estaré sin falta...he esperado tantos años para ver ese momento..-esta vez sonríe más ampliamente y una lágrima recorre la curva de su mejilla, con mi mano le limpio sus lágrimas de alegría.
-Basta...no lloréis, que no me caso...-trato de bromear, en ese instante oigo como un vaso cae y se hace añicos en el piso, vuelvo la mirada al origen del ruido y me encuentro a mi hermosa Oriana, quien parece no saber qué hacer, me mira y luego baja la mirada, y hay algo en su mirada que no me gusta, está cabizbaja, he notado que últimamente se pone así cada cierto tiempo, tendré que hablar con ellas a solas, me preocupa qué le pasa.
-Dis...disculpen yo solo...venia a ver si querías agua..y se..se me resbalo el piso..
-Aja..el piso se te cayó, esa es nueva..-definitivamente no me puedo evitar reir con la inocencia que nos trata de mentir, pero falla en su ataque de nervios. Se ha puesto colorada, ya me imagino lo que pudo escuchar, creerá que no me quiero casar, mi hermosa, si tan sólo supieras lo que quiero para ti, para que me des el Si. Anne ríe un poco y dice:
-Tranquila Ori, ya mando a alguien a limpiarlo no te preocupes..-y sale de la sala, dejándonos solos.
-Quise decir se me resbalo el vaso, pero no me dejaste corregir mi error..¿cómo se me va a caer el piso? -dice tratando de actuar, es espectacular, me siento en un sillón que me da la vista perfecta frente a ella, y apoyo mi tobillo en una rodilla, me recuesto relajándome, sin quererme perder ni una sola imagen de ella. Aunque por su mirada parece que le intimido, me encanta poder reconocer sus emociones sin que ella me diga una palabra, es que no se da cuenta lo expresiva que es con sus ojos y sus labios, ¿o es que yo le he prestado demasiada atencion a cada detalle de ella que ya le conozco mejor que a mi mismo?.
-¿Porqué no dices nada...y...y me miras así?
-Nada..es solo que...el piso se ha resbalado -rio al decirlo, está vez ella pone sus ojos en blancos, y ya entiendo porqué a veces a Mario se le hace divertido fastidiar, y es que en verdad los gestos que la gente hace son cómicos.- Te Amo, Oriana...-sus ojos se abren de par en par, luego una gran sonrisa se dibuja en su rostro, al igual que un color rosa empieza a pintarse en sus mejillas. No me resisto cuando la veo morderse el labio, reprimiéndome ver su sonrisa en su totalidad, me levanto y la beso, perdiéndome así en el tiempo y en el espacio, sólo imaginando, que esta será mi nueva vida, nuestra nueva vida.
Maratón 4/5
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The German (Adaptada)
RomanceJulian es un exitoso empresario aleman, marcado por su pasado decide viajar a España en busca de un nuevo entorno y nuevos negocios. Lo que no sabe Julian es que conocera a Oriana, una chica vivaz y espontanea. Comenzara a tener sentimientos por O...