El Amor es de las cosas mas valiosas e importantes en este Mundo, pero ¿Qué es para ti? ¿Es Dulce o Amargo el amor que sientes en tu corazón?
¿Es puro o es..... lujuria? ¿Siquiera es Amor o es solo Obsesión?... ¿Pero siquiera importa eso? Con tan...
A pesar de que durante el día, aquel distrito comercial se veía tan lleno de vida y alegría, durante la noche parecía un lugar totalmente diferente, era tan silencioso y llegaba a parecer desierto, ni siquiera los dueños de las tiendas que habitaban los departamentos parecían salir nunca durante la noche, y Kikyo lo sabía muy bien, por lo que no le fue para nada difícil escabullirse por el lugar arrastrando un cesto de compras plegable para llegar al callejón trasero fuera de la pescadería junto a su tienda, donde se incineraban los restos de pescado de manera instantánea, además, muchas otras tiendas les pagaban para hacer lo mismo con su basura. Encenderlo fue lo sencillo, lo difícil fue, meter esas extrañar bolsas, cada una pesaba bastante, meter solo una hizo que sus brazos quedaran adoloridos, por lo que decidió mejor solo quemar uno por uno.
Kikyo aún no comprendía porque Sesshomaru no podía deshacerse de esas extrañas bolsas el mismo, pero no quería preguntarle, parte de ella no quería que él se enojara con ella, ya que si lo hacía podría olvidarse de ella, pero parte de ella también ¡Quería que se enojara con ella para volverla a maltratar! Solo contemplar aquel fuego tan potente hizo que pensara en su propio fuego interior que solo Sesshomaru era capaz de provocar en ella... Sin darse cuenta siquiera, sintió como todo su cuerpo comenzaba a excitarse solo contemplando las bolsas de basura hacerse polvo uno por uno, pensar en Sesshomaru, y en como solo con sus pies fue capaz de hacerla sentir tan sucia y excitada ¡Dios! ¡Ese Hombre Era Un Dios!
Kikyo: (¡Sesshomaru Sama!) – Se abrazó a si misma al sentir como su cuerpo se estremecía y contraía. Finalmente acabo con las bolsas, en ningún momento siquiera se le pasó por la cabeza que había adentro, solo siguió ciegamente las órdenes de su Amo.
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Flash Back.
Sesshomaru: Tienes que asegurarte de no ser vista por nadie. Lleva algo con ruedas para trasladarlo todo, como un carito, pero al acabar con las bolsas, también quémalo – Ordeno sereno. Ambos estaban aún en la tienda, pero esta se encontraba cerrada. Sesshomaru había metido en una bolsa de basura las otras tres bolsas, utilizaba unos guantes para sujetarla. Al sacarlas, Kikyo sostuvo con algo de duda una de ellas, le costó bastante sujetarla, ya que era pesada, y parecía tener algo extraño dentro, algo que parecía una masa acuoso dura en algunos lados y grumosa en otros, olía bastante extraño de igual manera.
Kikyo: ¿Q-Que hay dentro de ellas? ¿Y por qué no puede deshacerse de ellas usted? – Se aventuró a pregunta. Pero Sesshomaru solo la miro con cierto enojo, ella trago duro.
Sesshomaru: Las Buenas Perras normalmente no cuestionan a sus Amos al dar una Orden... Solo Obedece y ya – Dijo severo.
