"Opposites" • [Kim Namjoon]

Capítulo 1

Me encontraba sentada junto a mi padre en aquella aburrida oficina del director, sinceramente me pasaba más tiempo aquí que en las habitaciones correspondientes. Todas las personas que asistían a esta escuela me conocían, pero no por un atributo, si no por mi fama de rebelde.

En un principio, la idea de entrar en esta institución élite no me agradaba en absoluto. Todos se creían superiores, pues sus padres eran personas importantes. Además de que literamente parecía una cárcel. Sólo los sábados y domingos podíamos salir de aquí, pero para ello necesitábamos una autorización firmada por nuestros tutores. En fin, después de años te acostumbrás a estas normas tan estrictas y asquerosas.

Director: Señorita Lara Thompson. Ya le expliqué que no debe contestarle a los profesores de esa manera.
Lara: ¡Vamos! ¿Usted nunca lo hizo? ¿Qué clase de vida aburrida llevaba?
Papá: Hija, no le hables así, es el director.
Lara: Será el director, pero no por eso es una persona superior.
Director: Lara, ve a tu habitación. Quiero hablar con tu padre a solas.
Lara: Está bien -me puse de pie y salí de la oficina con un portazo.

[Conversación entre el padre de Lara y el director]

Director: Señor Thompson, esta escuela es demasiado prestigiosa ante personas con mucha importancia en el ámbito político. La imágen de esta institución no puede ser dañada por actitudes como la de... su hija.
Papá: Por favor, señor Tulaff. Usted no puede expulsar a mi hija. Sé que está un poco loca pero sabe que si la saca de aquí, ella tendrá que regresar con su madre a Italia y Lara no quiere eso.
Director: -suspiró- Le daré una última oportunidad. Si Lara la utiliza de forma incorrecta, lo lamento por ustedes, pero la tendré que expulsar.
Papá: Muchas gracias. ¿Puedo hablar con ella ahora?
Director: Lara debería estar en clase ahora mismo. Cuando toque el timbre del recreo, puedes ir con ella.
Papá: -asintió- Le prometo que Lara mejorará su conducta.
Director: Eso espero.

[Fin de la conversación]

Estaba caminando por los pasillos, en busca del baño. Pues simulé tener un ataque de pánico para salvarme de una lección oral de historia. ¿Soy una genia verdad?

Luego de unos minutos fuera de clase, decidí volver. Si me encontraba alguien paseando por los pasillos, sin duda, sería mi fin.

Profesora: ¿Se siente mejor Lara? -mostró preocupación.
Lara: Si profe, gracias por preguntar.
Profesora: Entonces puedo seguir con la clase -reiteró.
Jimin: -levantó la mano, dando señal a que quería hablar.

Jimin era uno de los chicos más populares de esta cárcel debido a su carita de ángel, también era uno de los más inteligentes, algo poco común en los chicos lindos.

Profesora: ¿Por qué no pueden ser iguales que el alumno Park? Aprendan a participar en clase. Le doy la palabra Jimin, hable.
Jimin: Gracias profesora -hizo una pequeña pausa- Ya que estamos hablando de la cultura de Corea del Norte. La otra vez leí un artículo que decía que allí, la prostitución es ilegal. ¿Eso es cierto?
Profesora: Si, es cierto. ¿Quieren saber el por qué?
Lara: Parece que la madre de Namjoon no conseguiría trabajo si se fuera a Corea del Norte -dije en tono burlón.

Luego de soltar aquel comentario, todos mis compañeros se ríeron. Pues aquel rumor había salido en el diario de la escuela, nadie sabe quién lo escribe, pero la mayoría de cosas que se aparecen en él son ciertas.

Namjoon: ¿Por qué no te metes en tus cosas? -me miró.
Lara: ¿No crees que es mejor meterse la vida de los demás? -reí.
Profesora: ¡Thompson fuera de la clase!
Lara: -me puse de pie- ¡Pero si no hice nada!
Profesora: Sus comentarios desubicados hacia sus compañeros son motivo de expulsión -levantó la voz.
Lara: Está bien, no pelearé con ancianas.
Profesora: ¡Thompson!

Nuevamente mis compañeros volvieron a reír y yo me fui del aula con una cara de victoriosa.

Justo en aquel momento, sonó el timbre y observé a mi padre a lo lejos. ¿Por qué seguía aquí?

Lara: ¡Papá! -grité llamando la atención del nombrado.
Papá: Hija, te estaba buscando para hablar.
Lara: Vamos, dime qué tipo de idioteces te dijo el director sobre mí. No entiendo por qué siempre está pendiente de alguien como yo, debería preocuparse por su edad, bastante maduro está para molestarme. Lo odio, me cae muy m-
Papá: ¡Si no fuera por su paciencia tú ya estarías en Italia! -interrumpió mis quejas.

Su rostro era serio, y sus palabras me dolieron un poco. Nunca había visto a papá así, su vida siempre era alegría y comedia, pero hoy era distinto.
¿Qué pasaba?

Lara: Vamos papá, dime qué pasa.
Papá: Sé que lo que te pediré es complicado. También sé que tú eres parecida a mí, eres rebelde, sarcástica, no le haces caso a nadie, ni si quiera a mí, pero esta vez tendrás que cumplir lo que te pido, ¿solamente por tu bien sí?
Lara: Depende la gravedad del asunto.
Papá: Tienes que comportarte adecuadamente, no meterte en ningún problema. El director te dió una última oportunidad, y quiero que la aproveches, no quiero que te vayas lejos con tu madre -su tono sonaba preocupado.
Lara: Papá, pensé que era algo más grave -solté una leve sonrisa y tomé sus manos- Dudo mucho que lo pueda cumplir, pero haré lo que esté a mi alcance, solo por ti.
Papá: Muchas gracias hija, es la primera vez que te escucho decir palabras coherentes -sonrió.

Lo miré fijo y le devolví la sonrisa. En ese preciso momento es cuando comprendí lo que es hacer algo por la persona que quieres.