Wish [Finalizada]

Algo más?

Gruñendo furiosa, la joven mujer de cabello castaño corto y piel morena se sacudió para liberarse del fuerte agarre del gigante que la sostenía. Su esfuerzo era como el de una hormiga en el lomo de un elefante, sus golpes para que la soltara solo daban cosquillas. Aún así, intentó todas las veces necesarias para lograr huir, pero ninguna funcionaba.

Estaba en el hogar de esos monstruos por haber querido vengarse de ellos desde aquella vez que encontró a su hermano en Retrópolis, pero no pudo ir con él por el grupo que los atacó y lo hizo huir junto a otros chicos que no reconoció. Por nunca más encontrarlo, siguió al vampiro una vez que lo vio y llegó hasta su hogar en el cual no dudo en entrar para acabar con ellos, pero no había salido como esperaba y fue atrapada por Frank que no parecía soltarla por nada mientras esperaba como una gárgola al sepulturero.

Unos segundos después, el alto vampiro acompañada de su sobrina, su actual pareja y su vieja amiga entraron a la sala. El dueño parecía estar molesto y la pequeña igualmente lo estaba con él.

—¿Fue esta la cosa que entró rompiendo la ventana? ¿¡Esta enana!? ¡Ugh, malditos pend-! —suspiró buscando calmarse, no creía que alguien tan insignificante como ella fuera capaz de tal cosas viendo todas las marcas que tenía de lastimaduras o su vestido agujereado. Como respuesta, obtuvo un gruñido y varios arañazos al aire— Agh, ¿Por qué siempre los muertos de hambre vienen aquí? —acomodó su nuevo sombrero— miera, niña, allá afuera tienes muchos cadáveres que puedes devorar. Ve y come esos que no pienso darte nada de mi comida —más gruñidos, comenzaba a querer echarla de su hogar a palazos.

—¡Te mataré! —su collar celeste comenzó a brillar y Nita arrojó una reluciente esfera de energía que al caer al suelo levantó una pequeña nube que se dispersó y mostró a un grande oso que se arrojó hacia el de piel pálida con sus filosas garras.

No pudo acompañar en el ataque al animal que acababa de invocar ya que Frank aún la tenía del brazo. El oso fue un susto para Mortis, pero acabó casi al instante al ser defendido por el de la lámpara y la escaramuzadora antes de que lo atacaran. Emz seguía con su celular sin darle importancia a lo que sucedía.

—¿¡Te digo donde conseguir tu asquerosa comida y así me lo agradeces!? —furioso, el sepulturero tomó con ambas manos su pala— ¡Disfrutaré de mandarte a la tumba, pequeña insolente! —apunto de atacarla, se detuvo al sentir a Gene tomando su brazo— ¿Mmh? ¿Qué sucede, cariño? —miró a su pareja con repentina tranquilidad.

El de menor altura se quedó observando a la agresiva joven que no dejaba a de luchar contra el hombre que la sujetaba. Mortis hizo lo mismo, pero no encontró algo especial en ella. Tara siguió a sus amigos intentando encontrar lo que Gene veía. Al final, Emz tuvo la respuesta a lo que los tres tenían dudas.

—¡Ay, tampoco es tan difícil! —con celular en mano, se acercó al vampiro y a su pareja que aún no soltaba su brazo y le mostró la pantalla que tenía una foto del otro joven que vieron con Sandy— Mismo tono de piel, mismo color de pelo… se parecen bastante, ¿no lo creen?

—Sí, lo son —susurró la escaramuzadora ahora viendo a la menor como una oportunidad para traer a Sandy.

—Emz, ¿Por qué tienes una foto de ese chico en tu celular? —miró confundido y molesto a la zombi— ¿Estuviste tomando fotos en vez de ayudarnos contra ellos?

—Ni ahora, Mortis. Si está relacionada con aquel chico quizás podamos conseguir que Sandy venga con nosotros. Luego regaña a Emz si quieres.

—¡Cállate, bruja! —gruñó la menor.

—Tara, te están hablando —Mortis contuvo sus ganas de comenzar a burlarse de ella solo por que su pareja seguía abrazado a él y no soportaba que discutieran.