Solos tú y yo

1.4K 65 145
                                    

Las visitas comenzaron a ser cada vez más frecuentes, ninguno de los jóvenes soportaba demasiado sin el otro por lo que los mensajes estaban al despertar y al dormir para compensar el tiempo que no podían verse. Si la familia de Sandy no podía ir al pueblo, Leon rápidamente acordaba con su hermana y el antropomórfico para ir a visitarlos. Pero con el tiempo, su hermana terminó por cansarse de ir cada tres días a acompañar a su hermano, ella no podía hacer mucho en el hogar del vampiro y se aburría. También Crow abandonó la idea de ir con él cuando el pequeño cactus llegó al pueblo para vivir juntos.

No se enojó con su hermana o el asesino que había cambiado para que una vida mejor con su pareja. Entendía por que ya ninguno de ellos quería acompañarlo, aunque le molestaba la inmensa envidia que le tenía a la pareja formada hace tres meses atrás en aquel día que Spike sorprendió al mitad cuervo con regalos. Se sentía mal novio por haber hecho una confesión de solo palabras y sentimientos que comunicó ambiguamente y no haber hecho una entrada genial como el cactus.

Quería ser lo mejor que Sandy tuviera o viera, pero parecía ser imposible por las cariñosas parejas que los rodeaban y parecían ser algo que no alcanzaría nunca. Con tal de intentar mejorar, le daba todo lo que pedía, aunque sus besos y caricias se hubieran vuelto más atrevidas con tal de complacer su apetito sexual pero nunca llegaba a entregarse por completo a Sandy. Aquellos momentos en los que lo hacía no duraban demasiado ya que vivía con Nita y Bo por lo que no tenía el tiempo suficiente a solas.

Esperaba tener más tiempo con él, no dejaba de pensar en cuanto lo quería y justo ese día llegó al pueblo. Lo que le pareció raro ya que nunca llegaba sin avisarle a él.

—Voy a quedarme todo un mes en el pueblo —dijo dirigiendo sus ojos esmeraldas a Leon mientras Bo, Nita y sus amigas escucharon.

—Ah… eso está genial —contestó contento pero con su vergüenza sin dejarle gritar de la emoción. De solo saber que estaría cerca, sus mejillas se tiñeron ligeramente de rojo, que sus amigas lo miraran aumentaba sus nervios.

—¿Por qué? ¿Sucedió algo malo? —preguntó Nita desviando la atención de su hermano.

—Mis padres no estarán en casa por este mes. No quería molestarlos en su pequeño viaje así que vine aquí para quedarme con Spike hasta que vuelvan —respondió relajado aun siendo quien tenía la mirada del adulto que no dejaba de analizarlo.

—¿No prefieres quedarte con Leon? —propuso la pirata al lado de la pelirroja. El rostro de su amigo estaba completamente rojo.

—¡Sí! Podrías quedarte con nosotros —gritó la morena.

—¿Lo dicen en serio? —observó sorprendido de la castaña al de pelo azabache.

—Por mi, está bien, es lo que Leon ha querido todo este tiempo —el más alto de los castaños lo miró con odio—. Podrías mostrarle tú escondite que tanto lo presumes —las más jóvenes adoraron que el mayor se uniera a ellas para avergonzar al encapuchado, la seriedad del adulto pareció ser más una orden.

—¿Escondite? —los ojos esmeraldas volvieron a Leon con traviesa curiosidad.

—¡Nada! —molesto, Leon intentó ocultar todo lo que estaban diciendo de él— ¡No es nada! ¿Puedo hablar? Yo no he aceptado nada de esto y actúan como si Sandy fuese a quedarse a dormir conmigo.

—¿Acaso no quieres que tu noviecito se quede? —interrumpió Penny lo que su amigo decía sin pensar.

—No es eso… me gustaría que se quedara —llevó su mirada al piso avergonzado.

—A mi también me gustaría, pero Spike ya preparó todo para que me quedara con ellos —Sandy buscó la mirada heterocromática, pero no la obtuvo. Ahora, Leon estaba molesto, avergonzado y desilusionado.

Wish [Finalizada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora