31 días de Akafuri por diciembre

Herida

Supo que Akashi se había lastimado y fue rápidamente a Kyoto casi rogándole a sus padres que les adelantara la mesada para comprar un maldito boleto de ida por el tren que era bastante caro para ir a ver a su amado. Llego agotado y lo recibieron un poco sorprendidos puesto que era algo tarde cuando había llegado.

Llego a la habitación de Akashi, pensando que estaría su padre con él y con médicos, pero solo estaba este acostado porque ya era casi de noche y usando la laptop tranquilamente.

― ¡Sei! ¡Supe que estabas herido! ¿¡Estas bien?!

―Oh Kōki, no pensé que vendrías a visitarme―Le mostró una pequeña herida que tenía en la mano ya con una tirita―Solo me pase a llevar con un borde afilado de manera muy rápida de unos documentos.

Furihata quedo con la boca abierta, pensó que había sido algo grave por el tono que había usado Kuroko...

...Kuroko le había hecho una broma muy pesada.

―Caí en lo que dijo Kuroko―Gruño―Ya verá cuando lo vea, me preocupe demasiado.

― ¿Por qué no te quedas hoy ya que te tomaste tantas molestias? ― Akashi dejo la laptop a un lado y miro a Furihata con una mirada de deseo― ¿No quieres atenderme?

Kōki no pudo negarse a tal petición y se metió en la cama de Seijūrō.