William estaba inconsciente en la cama de un hospital. Aun recuerda cuando quiso alejar el cuerpo de Edward de los disparos de la policía, fue muy tarde, sólo sintió el líquido en sus dedos y el cuerpo de su amado el ser desplomado en sus brazos y por último recibir disparos en su espalda.
Su mano estaba sujetada a la camilla con una esposa, el tubo en su boca le hizo darse cuenta de que en verdad estaba gravemente herido, la luz del techo lo cegaba. El doctor se movió cuando el alboroto fuera de la habitación se hizo presente, no entendía nada de lo que ocurría. Kaleb entró con un arma y le disparó al médico. Quitó el tubo de su boca y la abrió repetidas veces para poder hablar.
— Esto es más fácil de lo que imaginé — Kaleb lo desconectó, y disparó en las esposas — Ellos querían quitarte los cables y aplicarte la inyección letal por los crímenes que has cometido.
— Agua... — Kaleb acercó el vaso a los labios de William —Edward...
— Tengo que sacarte de aquí, no sé porque presiento que ellos traerán a la marina, al ejército nacional y a no sé quien más para llevarte — le ayudó a ponerse de pie — Tenemos que irnos amigo.
— ¿Qué está sucediendo? ¿Dónde está Edward? — El brazo de Kaleb se colocó en su cadera — Habla conmigo... donde esta mi precioso...
— Cuando lleguemos a la casa te diré, amigo, ahora debes de descansar.
— No, quiero saber dónde está mi precioso — buscó aire, el cual parecía nulo — Te exijo saber dónde está.
— Ahora no, hermano, no me hagas preguntas las cuales no puedo responderte — su voz sonó baja, y llena de dolor — Han pasado tantas cosas desde que esos hijos de puta de dispararon...
— ¿Cuánto tiempo pasó? — Preguntó, mientras subían a una camioneta — Tu barba no puede estar tan larga y menos crecer tan rápido de un día para otro.
Kaleb se giró hacia la ventana, no estaba preparado para contarle lo que pasó el tiempo que estuvo en esa maldita camilla, y que él tuvo que sacarlo para que no lo desconectaran.
— Han pasado dos años desde que estás en coma, Will — los ojos de William se abrieron a más no poder — Edward murió, junto con el bebé esperaba.
— ¿Dos años? ¿Estuve en coma dos años?
— Te explicaré todo cuando lleguemos a la casa, pero ya no me sigas haciendo más preguntas — su mirada estaba perdida en la ventana — Hay cosas que debes de saber y la verdad te recomiendo que descanses, puede que sea algo duro para ti.
*****
Mike estaba sentado en una silla de la sala de espera, su mejor amigo había muerto para cuando llegaron los paramédicos, no había razón alguna para quedarse en ese lugar. Deseaba con todas sus fuerzas que William se haya muerto y no él y Kaleb lo sabía, presentía que el odio que el menor sentía por su mejor era inevitable. Cada vez que Kaleb quería tocarlo se alejaba, todo el rumor se corrió por todo el estado, pero nadie supo quien los delató.
En si había sido a todo el cuartel en el que William y Kaleb trabajaba.
— No te atrevas a tocarme nunca en tu puta vida — siseó — Por culpa de tu estúpido amigo y tuya, mi mejor amigo está en una morgue.
— Alguien nos delató con la policía, no teníamos idea de que esto pasaría... William sabía que había un sapo entre nosotros pero nunca supimos quien era.
— No me importa, espero que se mueran y que jamás vuelvas a aparecer en mi vida.
— No puedes decir esta estupidez — bramó.
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My Precious {gay} {m-Preg}
RandomEdward Coleman, es el chico nerd que suele pasar de desapercibido ante los ojos de los demás, pero eso puede cambiar en un abrir y cerrar de ojos. Edward piensa que seguir siendo el típico nerd de la escuela puede tener sus ventajas y más aún si tie...