El libro rompemadres. [Only Porn]

La princesa y el sapo. (Nabin)

— Vayan, y busquen a esa repugnante y babosa ¡rana!

Las sombras salieron con rapidez de la guarida del brujo, que a su opinión era de lujo.
Nabin corría por el pantano en busca de hongos para Tiana, cuando vio que al otro lado del pantano, no podía llamar a su amigo porque estaba esperando con la boca echa agua la maravillosa sopa de Tiana, así que decidió meterse con cuidado al agua y nadar hasta los hongos.
Pero sintió algo jalando su pata.

— ¿Huh? — abrió los ojos asustado, y <<bloop>> fue lo único que se escuchó cuando desapareció.

Una sombra lo llevó hasta el fondo del río y lo golpeó contra una piedra para dejarlo inconsciente, lo sacó del río y lo dejó cerca de donde de encontraba Tiana y dejó junto a el los hongos que buscaba, al rato Nabin despertó y actuó como si nada, y llevó los hongos a donde se encontraba Tiana.
El tiempo pasó, el príncipe Nabin ahora se encargaba de los shows del restaurante Tiana's un día guardando los instrumentos y ya cerrado el restaurante dejo que su esposa se fuera primero a casa, cerró las puertas y se quedó dentro del restaurante para sacar cuentas de los ingresos de capital y el costo de la materia prima para el restaurante, nunca se había visto sacando cuentas pero se le daba bien sacar cuentas. Todo transcurría muy normal hasta que vio dos manos queriendo tomar su cabeza por el rabillo del ojo, Nabin se asustó y miró a sus lados, al no ver nada se intentó calmar pero al momento las luces empezaron a fallar, dejando un color amarillo tenue.
Algo lo sento de golpe, estaba asustado buscaba con la miraba cualquier cosa, lo que fuera, pero que respondiera la pregunta sobre que era lo que estaba pasando. De repente sintio como algo trepaba por su pierna haciéndolo soltar varios gemidos roncos y bajos llegando a su entre pierna causandole un cosquilleo que le recorrió la espalda.

— ¡Hah! ¿Quien eres? ¡¿Como entraste?! — le grito.

La cosa que trepaba su pierna empezó a acariciar por dentro de su ropa interior el cuerpo del joven, causandole escalofríos por la sensación fría.

— ¿Porque haces eso? ¡Ah...! ¡No! — se negaba a pesar de tener algo que claramente lo estaba masturbándo debajo de su ropa —. Oh por... ¡Ngh! S...si... — movía sus piernas al no poder soportar el tacto de aquella cosa.

Se retorcía en la silla, soltando gemidos y sintiendo como poco a poco llegaba a su punto.
Su pantalón fue bajando lentamente junto con su boxer, dejando libre su erección venosa. Una fuerza lo dejó sobre el escritorio tomando sus manos y poniéndolas en su espalda.

— ¿Que? ¿Que es...? — miro la pared y vio como otra sombra estaba detrás de él golpeando algo en su trasero.

El exprincipe Nabin fue penetrado brutalmente en un momento rapido, soltó un grito de dolor, mientras sentía que la cosa que estaba dentro de el lo embestia, gritaba y gemía sintiendo aquella cosa de gran tamaño jugar en su interior.

— Ha... ¡Ah! — grito al sentir un par de dientes en el.

El monstruo detrás de el lo había mordido, dejándole marcas y algunos chupetones cerca del cuello.
Aquella cosa disfrutaba moverse dentro del exprincipe, lo lamia y acariciaba para relajarlo y poderse mover con más facilidad. El joven solo gemía, al ser la primera vez que lo penetraban lo sentía tan mal, tan fuerte y extraño, tan doloroso que solo cuando sentía en esa parte específica de su trasero en la que sentía como su cuerpo se estremecía. No sabía cómo explicarlo, era un punto que el monstruo alcanzaba cada vez que lo embestia con fuerza, su venudo pene estaba a punto de soltar el líquido que por obvias razones Nabin no quería soltar. Pero fue cuestión de segundos para que nabin tuviera un espasmo, soltó un fuerte grito en el momento al sentir al monstruo completamente dentro de el.
Lo soltó y lo dejó caer en el escritorio, pero después lo colocó en el suelo. Posandose sobre el y empezando a penetrarlo con brutalidad y embestirlo como nunca, Nabin jadeaba, un hilo de saliva salía de su boca, el monstruo cansado descanso sobre Nabin jadeando y dejando que su saliva callera sobre el.

— Oye... Eres tan... — sonreía viendo la pared —. Nunca pensé hacer esto.

El monstruo rasgó la espalda de Nabin rompiendo su chaleco y su camisa, y apenas rasguñando a Nabin. Los movimientos lentos del monstruo hacían gemir a Nabin y lo hacían sentir como nunca, el monstruo aferrado al culo del exprincipe y motivado solo seguia con ese ritmo constante para escuchar a Nabin, le agradaban esos sonidos obscenos que ambos hacían.

— Oh por... ¡Si! Ahí... — se mordió los labios sintiendo la mazacuaza del monstruo justo en el punto que amaba.

El monstruo se quedó quieto un momento y empezó a dar pequeñas embestidas en ese pequeño punto haciendo gemir fuerte mente al príncipe.

— ¡Hah! ¡Si! ¡Ahí! ¡Más! — sentía como iba a venirse con ese movimiento. Aunque obviamente cansado por averse venido ya.

El monstruo soltaba jadeos y liquido pre-seminal aunque no se notara al estar dentro del joven, también se sentía extraño, sentía como quería llenar a Nabin sentía como todo iba a salir de él en un momento, empezó a gemir mientras cada vez entraba más y más en Nabin. Hasta que se vino dentro, saliendo de este por el montón de líquidos que habían, Nabin se vino después y callo al suelo cansado y gimiendo.
El monstruo vio el pene de Nabin caido, y no le gustó.

— Mmm... Ah.... — gemia mientras descansaba.

Nabin se volteó y empezó a sentir como algo trepaba su pene.

— Oye... No... Ngh... — intentaba negarse hasta que sintió como algo entro en ese pequeño agujero.

El príncipe Nabin empezó a mover sus caderas gimiendo, el monstruo se había metido dentro de el. Nabin cerro sus puños con fuerza y con ellos sus ojos, intentaba aguantar lo más que podía. El movimiento de arriba a abajo del monstruo hacia que Nabin sintiera miles de orgasmos en nada, llegando hasta a gritar del placer. Nabin se vino muy rápido esta vez, el monstruo de las sombras se fue, pero antes arregló las luces, dejando un desastre, Nabin cubierto de semen y sus alrededores, y también un Nabin que seguia gimiendo y jadeando.