Capítulo 21

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Estaba en mi casa sentada frente a la laptop, tenia abierto el mail pero a pesar de que ya había leído la misma linea varias veces no lograba comprender nada, aun rondaba por mi cabeza las palabras de Nicolás.

"Tomas se casara en mes y medio"

"Es imposible que tuviera un romance contigo"

"Lleva meses planeando la boda"

Para ser honesta no supe ni como salí de ahí y como termine sentada aquí. Puse la cabeza entre mis manos, me dolía mucho, este día no había sido el mio.

Imprimí el mail para volver a leerlo, en este momento no tenia cabeza para nada, decidí meterme a bañar para poder aclarar mi mente y tratar de olvidar este día.

Cuando me volví a sentar ya mi cuerpo estaba mucho mas relajado después del baño y creo que también me ayudo la copa de vino que estaba tomando, traía puesto un pijama de franela y gracias a eso me sentía cobijada, tome el mail que tenia sobre la mesa y comencé a leerlo.

Hola, se que tal vez no es momento para escribirte, pero es el único medio que conozco para localizarte. Lee bien por favor, necesito que regreses a casa, las cosas se complicaron y pues... Iré directo al grano, hermana necesito que regreses, se que diste un plazo de tres meses y esta por terminar pero realmente necesito que regreses antes de esa fecha, papá esta muy mal de salud y mamá esta desesperada con la empresa, esta a punto de rematarla y solo tu voto en contra evitara que lo haga, pero lo peor es que se la quiere vender a un accionista...

Un segundo, un accionista quiere comprar la empresa pero ¿Quién? Mientras me quebraba la cabeza pensando el timbre sonó y de manera automática fui a abrir.

-¿Porqué no contestaste mis llamadas?- me ataco Liz en cuanto abrí la puerta, la deje entrar y volví a sentarme tomando mi teléfono, tenia al menos 10 llamadas perdidas de ella, 6 mensajes de ella también y 3 llamadas perdidas de un numero desconocido, hasta que la pantalla se apago, ya no tenia pila.

-Lo siento, llegue a casa y me metí a bañar y se me paso el tiempo, no escuche el teléfono-

-¿Qué pasa?- dijo mientras se sentaba -Escuche que hubo una trifulca en la cafetería y que estabas implicada- asentí y sonreí al escucharla decir trifulca.

Suspire y comencé a relatarle todo, para cuando me percate ya estábamos en la cocina comiendo un pedazo de pastel con vino, bueno ella con jugo de naranja.

-Espera un segundo- mastico el pastel y lo trago -JODER, es real todo lo que me acabas de decir-

-En serio debes de dejar de leer esos libros españoles, pero si es real todo lo que te acabo de contar y ahora lee este mail por favor-

Mientras ella lo leía fui a mi cama a buscar la bolsa para sacar el cargador del celular, lo conecte y regrese al lado de mi amiga y cuando la vi no sabia si reír o preocuparme.

Parecía una actriz leyendo una mala noticia y tenia la boca abierta.

-Cierra la boca o se te meterá una mosca-

-¿Estas de coña?, como puedes bromear en un momento como este- alce las cejas al ver lo alterada que estaba -dime ¿Cómo es posible que tu hermano no te haya dicho nada? ¿Estas consciente que faltan tres días para el plazo?-

-¿Plazo? ¿De que hablas?- me paso la hoja y retome la lectura en donde la había dejado.

... No es fácil para mi decirte esto, pero nuestra madre le quiere vender la empresa a Armando, si al mismo que tu conoces, la venta se llevara a cabo el día 18 de este mes, así que ya sabes lo importante que es tu regreso hermana, necesitamos que vuelvas, por favor, se que no sera fácil enfrentarte a él pero debes volver, no podemos dejar que nuestra empresa caiga en manos de ese tipo, por favor cualquier decisión que tomes avísame, te quiero.

Me deje caer en la silla y me lleve la mano al pecho, todavía me dolía ese nombre pero sobre todo que mi madre este dispuesta a venderle a el.

-No había terminado de leer el mail, no creí que estuviéramos tan mal-

-¿Sabias que tu padre estaba enfermo?-

-Si, pero no sabia que estuviera grave- eso me hizo sentir mal, sabia que mi padre estaba enfermo pero jamas imagine que siguiera en ese estado.

-¿Qué harás?- pregunto Liz.

Alce la mirada y por primera vez tenia bien claro lo que haría, me levante y tome mi laptop y comencé a escribir. Me tarde al menos 10 minutos para terminar y la envié.

-¿Qué hiciste?- acabo de mandar mi carta de renuncia a Damian con copia a RH y a Nicolas-

-¿Y Tomas?- pensar en el me dio un pinchazo en el corazón pero sabia que a final de cuentas no teníamos nada.

-En este momento debo concentrarme en la empresa de mi familia, sabes muy bien que esa empresa la hicieron mis abuelos, juntos crearon lo que mi madre quiere tirar a la basura y no lo voy a permitir, mañana regresare a casa-

-Querrás decir que regresaremos, no pensaras dejarme aquí ¿Verdad? Ademas ya te había dicho que necesito hablar con mis padres y no tengo nada aquí que me retenga-

-¿Y el padre el niño?- pregunte mientras vaciaba mi copa de vino.

-Por el no hay problema, estoy segura que lo volveré a ver- suspiro.

Asentí y me levante para abrazarla, se que seria algo duro dejar esta ciudad pero teníamos que regresar para continuar la historia en donde la dejamos.

-Bueno iré a hacer mis maletas y vendré a quedarme contigo- asentí y la acompañe a la puerta -Espera ¿En que nos iremos?-

-Tengo que estar en casa cuanto antes, pero si tomamos el avión sabrán que vamos en camino, así que lo ideal seria ir por carretera, nos iremos en carro-

-Me parece bien, vendré mas tarde para irnos temprano- asentí y nos despedimos.

Escuche la alerta de un mail nuevo, era de Damian.

El texto decía "Espero que sea una broma, porque no me hace la mínima gracia"

-La verdad es que no lo es- susurre.

Me serví la ultima copa de lo que quedaba de la botella y la tire a la basura, me acerque a la ventana y contemple la noche y las luces de esta ciudad "tengo que regresar" decía en mi mente "Enfrentarme a él", pero no mentiría en algo, estaba realmente aterrada de volverlo a ver, creí que ese día jamas llegaría pero estaba a pocas horas de que ocurriera.

Sabia lo que tenia que hacer, por mi familia, por mi hermano y por mi. 

Yo no dejare que ese hombre se salga con la suya, jamas.

Esos labios que beseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora