Seguía con cara de sorprendida ¿Pero quien coño es esta vieja? "Rayos debo de dejar de leer libros traducidos al castellano". Mis ojos ardían al ver como ella le acariciaba el pecho y el ni se inmutaba, pero ¿Qué demonios estoy haciendo? Tomas no es nada mio, así que con mucho cuidado me alejo de esa escena.
Me dejo caer en el asiento y comienzo a trabajar en mi computadora. Trato, en serio que trato de ya no pensar en lo que había ocurrido en las escaleras y lo peor fue recordar como esa rubia despampanante se abalanzo sobre Tomas.
"El no es nada tuyo" Decía mi consciencia "Ponte a trabajar mejor" agrrr porque demonios me pasa esto a mi.
Hice ejercicios de respiración, era mejor concentrarme en el trabajo que pensar en lo ocurrido.
Pasaron las horas volando y cuando me di cuenta ya estaba recogiendo las cosas para irme a casa.
Mientras subía al elevador marque a Liz para saber en donde estaba.
-Hola cariño- dijo en un susurro
-Hola y se puede saber en donde estas y porque no me has llamado?- dije mientras subía gente de otros pisos.
-Lo siento me avisaron a ultima hora que los jefes tendrían junta, pero yo estaba volando a California para una reunión importante, así que es probable que vuelta hasta mañana-
-Que lastima- dije un poco triste
-¿Qué ocurre? Porque te escucho melancólica- no quería agobiarla con mis tonterías.
-Prefiero contarte en persona así sera mas fácil de entender y puede que necesite tu apoyo-
-Tratare de llegar lo antes posible, hasta mi regreso puedes portarte mal tal vez necesitas distraerte o mejor dicho gozar de la vida-
-Tal vez tengas razón-
A pesar de lo que me había dicho Liz fui directa a casa, no quería salir, sobre todo por el beso.
Sentada en mi sofá, aun puedo sentir los labios de Tomas, como me correspondió ese beso, sacudo la cabeza, tengo que olvidarlo. Tomo el control y cambio de serie, la verdad ya no hallo que ver ya termine la serie completa de Sabrina... Ahora que lo pienso tardaron mas en hacerla y subirla que yo en verla.
Pongo una película cualquiera y comienzo a verla pero sin ponerle atención, cuando comienza la escena en donde aparece la nave espacial comienzan a tocar la puerta.
Eso es raro ya que no espero a nadie, lo ignoro y vuelvo a poner atención a la tv, cuando comienza a ponerse buena la trama vuelven a tocar la puerta.
"Quien podrá ser a estas horas" me levanto a regañadientes, espero que no sea nada importante porque estoy vestida con mi pijama.
-¿Qué se le ofrece?- digo bastante molesta cuando abro la puerta, y al ver unos ojos grises oscurecidos, un extraño escalofrío recorre mi espalda, poniéndome la carne de gallina.
-¿Qué haces aquí?- digo con una voz algo chillona.
Veo como una sonrisa cruza por su perfecta boca. Esta vestido aun con ese traje de infarto, su cabello luce alborotado, como si se hubiera pasado las manos muchas veces por el y sin decir palabra entra en mi pequeña casa.
Trago saliva y lentamente cierro la puerta "esto es real" me digo mas como afirmación que como pregunta.
Me coloco frente a el sin apartar la mirada, mientras que el inspecciona mi pequeño lugar, ahora mi espacio se ve muy pequeño con el en medio de la sala. Su mirada se posa en la mía y alzo una ceja a modo de pregunta.
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Esos labios que bese
Romansa-¿Ni siquiera eso puedes hacer como mujer?- esas son las ultimas palabras que mi madre me dijo antes de que me fuera de casa, no podía seguir viviendo ahí y ver la mirada triste de mi padre, oír las palabras crueles de mi madre y soportar el apoyo d...
