Capítulo 11

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—Ven, acércate —Viktor tomó las manos de Yuuri mientras decía esto y lo abrazó cerrando sus ojos. Dios, aun podía sentir latir a su corazón, como desesperado por salir de su pecho. Todo sucedió muy rápido, pero su cuerpo se sentía muy dispuesto a correr kilómetros y encontrar a su omega.

Si bien parece que Yuuri necesita más aquel abrazo, el omega sabe que Viktor está afectado y se acurrucó cuidadosamente en sus brazos. Hace que el alfa lo quiera un poco más de lo mucho que ya lo quiere, adora la forma en que cubre su inseguridad con amor.

El alfa respiró profundamente y soltó un suspiró. Yuuri estaba ahí, a su lado, pero él sentía que aún podía desaparecer. Que aún era posible que alguien logrará quitarlo de su vista y llevarlo lejos. Su respiración se volvió errática y el omega tuvo que soltar un poco de feromonas para tranquilizarlo. Viktor abrió los ojos con determinación y con voz clara le aseguró a su omega — No dejaré que nadie más intente hacernos daño, Yuuri. —el omega asintió con la cabeza y se quedó observando la nada, ahora parecía que todo su coraje se había evaporado.

Se quedaron un momento así, se soltaron cuando divisaron a la familia de Yuuri en un auto azul. Se subieron en él y ahí el omega le explicó a Viktor a donde había ido, el alfa rebuscó en su bolsillo y le mostró una caja de medicamentos. Él olvidó dárselas, pero sí las había comprado.

El omega se abrazó a Viktor durante todo el viaje y sus padres se sintieron un poco culpables al llegar a casa y decirles que tenían que separarse y bajar. Mari los esperaba en la puerta con los nervios de punta y pudo respirar al ver a su hermanito a salvo. No quiso preguntar nada y dejó que la pareja entrara a la casa.

Recién pudieron notar cuan afectado estaba Yuuri, pues no soltó la mano de Viktor en ningún momento y cuando se sentaron en el sofá de la sala, se acurrucó en los brazos del alfa escondiendo su rostro. Su madre les trajo un té tibio y un poco de chocolate para el omega. Luego se retiró y fue a conversar con su esposo.

Viktor susurraba palabras dulces en el oído de Yuuri, quien no parecía querer salir de su escondite, no quería dejarlo solo si iba a seguir así. Se hacía tarde, sin embargo. Para el bien de ambos, la hermana de Yuuri les comunicó la resolución de sus padres, Viktor tendría que quedarse a dormir.

El omega realmente no prestó atención, él no parecía dispuesto a separarse de Viktor. Dejaron a la pareja en la sala y oyeron claramente cuando Yuuri empezó a llorar, él podía demostrar mucha determinación y fuerza, pero al final se derrumbaba.

El alfa besó los parpados de Yuuri y trató de susurrar promesas que lo calmaran — Mi dulce omega, no llores, por favor. — esto estaba doliendo tanto, ninguna persona merecía pasar por lo mismo. Viktor ya no pensaba que fuera tan descabellado hacer que aquellos dos pagaran con sangre por esto, cada lagrima que caía por las mejillas de Yuuri le hacían pensar seriamente en destrozarlos. Lo vulnerable que se veía, sus ojos cerrados y el temor en su cuerpo, solo aumentaba su enojo.

Viktor decidió que tenía que darle a Yuuri el medicamento que había comprado, estaba feliz de haber conseguido pastillas en vez de inyectables. No fue tan difícil lograrlo, el omega parecía un muñeco, esto preocupó al alfa. Sus mejillas no estaban sonrojadas, su semblante era inquietante. Viktor supo que Yuuri continuaba repitiendo en su mente los sucesos pasados, una y otra vez. Esto le estaba haciendo daño.

El padre del omega se presentó antes de que el alfa pudiera actuar y suponiendo que su hijo seguía conmocionado, habló delicadamente y susurrando con Viktor — Sube a Yuuri a su cuarto a descansar, si mañana despierta mejor, irá al colegio— El Beta soltó un fuerte suspiro — Tiene que tomar las clases de recuperación por los días que faltó, lo bueno es que podrás ir con él. Y tienen que contarnos lo que pasó, para poder ir a la policía. — Cómo pudo olvidar Viktor aquello, la familia necesitaba una explicación.

—Fue culpa de una omega del colegio, así que supongo que también tendremos que hablar con la directora —el padre de Yuuri frunció el ceño, pero mantuvo la calma—. Hablaremos de eso mañana, ahora los dos tienen que descansar. Rápido —el alfa se levantó con dificultad, Yuuri ahora se abrazaba a su cuello; así que hizo que rodeará su cintura con las piernas. Antes de empezar a subir las escaleras fue retenido por el padre de Yuuri.

—Gracias por cuidar a nuestro hijo, Viktor. En serio, estamos agradecidos.


...


—¿Qué hora es? —Yuuri veía la ventana con los ojos entrecerrados, no sabía cuánto había dormido. Se sentía liviano entre las cobijas de su cama y la persona a su lado. No recibió respuesta, Viktor yacía plácidamente dormido y parecía tener un sueño profundo. El omega sintió sus ojos hinchados y quiso levantarse para lavar su rostro; sin embargo, estaba atrapado por unos manos que lo tomaban por la cintura.

Bueno, no era realmente importante mojar su rostro, así que se acomodó y volvió a dormir. Con Viktor justo a su lado, sentía paz; y estar en su casa lo hacía sentir protegido. Tenía que seguir siendo fuerte, no podía permitir que esa omega se saliera con la suya, que lo asustará. Había llorado y era suficiente para desahogarse, por ahora. Tenía a su familia, tenía a su alfa; no iba a esconderse más. Solo tenía que ser más cuidadoso e inteligente, el mundo era peligroso, eso está claro, e igual no puedes vivir atemorizado. Yuuri iba a cambiar la situación a su favor, iba a destruir totalmente a esa chica. 


Continuará....



All love and so kiss. Amo sus comentarios, conspiren sobre la continuación xd. 

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