capítulo 16

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Cuando Jungkook habló de probablemente teñir su cabello, Jimin le creyó.

El alfa resultaba realmente atractivo con el tono negro, pero a Jimin le habría encantado con cualquier otro. Pero por supuesto, eso no ocurrió.

—Q-que...

Jeon Jungkook apareció el lunes casi a medio día, buscándole dentro de la cafetería escolar, con una rosa blanca en la mano y el cabello hecho en pequeños rulos. De sus orejas colgaban pendientes largos que le hacían lucir como una copia exacta de los Idols que Jimin amaba escuchar.

Robó miradas y no le interesó, su atención siempre estuvo puesta en encontrarle y cuando al fin lo hizo, le había sonreído tan bonito que las mejillas de Jimin se sonrojaron y sus orejitas también.

Jimin tocó el sticker de estrella que decoraba su caliente pómulo y respiró profundo cuando Jungkook llegó a su lado y le tendió la rosa mas preciosa del mundo, de su mundo.

—Sorpresa.

Por supuesto. El pequeño omega se había llevado la mejor de las sorpresas. Pero eso no se debía al cambio de Jungkook, a su cabello o a lo bien que todo le sentaba, si no a la posibilidad de haber encontrado a su otra mitad, en alguien tan dulce, tierno y amable como lo era su alfa.

Jimin entonces deseó muchísimo, poder obtener sus besitos. ¡Solo uno! O varios si se podía.

douceur 丼 kookmin.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora