The way we are (Eminem Fanfiction)

Capítulo 5

NARRA MARSHALL:

La luz que entraba por la ventana me despertó, entorné los ojos mientras me acostumbraba a los rayos de sol que me deslumbraban y me giré para ver si Shana seguía durmiendo. Me di la vuelta con una sonrisa tonta en la cara al imaginarla ahí dormida a mí lado, pero se me borró de golpe cuando vi que había desaparecido de la habitación, me incorporé un poco en la cama para ver si veía su ropa encima del sillón o algún rastro de ella pero no vi nada. Algo llamó mi atención, sobre la mesa había una bandeja con el desayuno servido. Mi cabeza empezó a crear sus propias conclusiones, "Seguro que Shana después de haberme besado anoche, se ha arrepentido y se ha marchado corriendo para no tener que darme ninguna explicación, seguramente no volvería a verla más, no querría saber nada más de mí" Sacudí la cabeza para intentar borrar esa idea, pero cada vez me parecía más razonable. Me acerqué a la mesa y busqué desesperadamente entre el desayuno para ver si me había dejado alguna nota con su teléfono o algo, pero no tuve suerte. No podía creer que se hubiera ido antes de que yo me despertara, después de todo se había ido sin ni siquiera despedirse. Me llevé un mano a la nuca y di un suspiró, pero algo detrás de mí capto mi atención.

-Ehhh que pasa no me piensas esperar para desayunar- escuche a mi espaldas.

Y allí estaba salía del baño con el pelo mojado y con la misma camiseta que le había dejado anoche, aunque ahora también había cogido unos pantalones de mi maleta, la misma que todavía estaba sin deshacer en la otra habitación. Preferiría que no se hubiera puestos los pantalones, estaba muy sexy cuando solo llevaba la camiseta pero me conformaba con que no se hubiera marchado corriendo. La miraba mientras sonreía como un imbécil al verla allí plantada delante de mí, pero conseguí articular unas palabras.

-Pensaba que te habías ido.

-Sabes que me gusta desayunar contigo- dijo mientras pasaba a mi lado y me cogía del brazo, tirando de mí hasta la silla.

-Y a mí contigo.

Me senté donde me indicó con el brazo y cogí un vaso de zumo sin saber muy bien como entablar una conversación.

-¿Sabes? Me podría acostumbrar a dormir contigo todas las noches- le dije mirando el vaso.

-Anda ya, seguro que estas deseando traerte a alguna chica para acostarte con ella-dijo con la vista fija en la mesa.

-Desde hace un par de días a la única que quiero traer aquí es a ti.

Entonces levantó la cabeza buscándome los ojos, nos quedamos mirando unos segundos. No sabía cómo había sido capaz de decirle eso, nunca había actuado así con ninguna chica, pero ella era especial.

NARRA SHANA:

Sus ojos me miraban nerviosos esperando una reacción ante su comentario, entonces vi claro lo que quería hacer. Me levanté de la silla y tiré de su mano poniéndola en mi cintura. Lo acerqué a mi cara hasta estar a unos pocos centímetros y entonces lo besé. El enseguida apretó sus labios contra los míos y se fue abriendo paso en mi boca mientras enredaba nuestras lenguas. La cosa estaba poniéndose cada vez más caliente, sus manos habían bajado hasta mi culo y lo apretaban mientras me pegaba a su cuerpo, pero los dos sabíamos que teníamos que parar. Nos fuimos separando mientras nos mirábamos a los ojos, y le sonreí antes de darle un beso fugaz en los labios. Me miraba con una media sonrisa en la boca mientras me seguía sujetando del culo.

-Me tengo que ir ya-dije quitando mi mano de su cuello.

Dio un suspiro y dejó de agarrarme el culo.

-Está bien, pero me tienes que prometer que no va a ser la última vez que te vea.

Me mordí el labio y me fui al baño a ponerme mi ropa. El se quedó parado mientras me miraba sin decir nada. Mientras que él estaba durmiendo había cogido de la otra habitación un lápiz y una hoja de papel, le había escrito mi número de teléfono y mi dirección y se la había dejado en el cuarto de baño. Cuando me vestí salí del baño, Marshall estaba sentado en la cama, me acerqué a él de forma seductora y le susurré algo en el oído.