Bell, el Conejo Blanco de la familia Freya.

CAPITULO 2: FIREEE BOOOOLT!!

Eh decidido poner a Welf como acompañante de Bell para los sucesos que sucederán más adelante.

Lili no aparece en este fic por obvias razones. Primero porque no le veo una utilidad, lo único para lo que podría servir es para hacer relleno, y ya elegí algunas otras chicas para causarle celos a Freya, y ella no está en mis planes.

Segundo, quiero que Bell tenga más participaciones con la familia Freya cuando se vuelva fuerte.

Bueno sin nada más que decir comencemos!!

|pensamientos|: | mis pensamientos no pueden ser leidos|.

(Acciones): (sonreír), (sonriendo).

CAPITULO 2: FIREEE BOOOOLT!!!.

Después de que Bell lograra derrotar a la gran bestia Bugbear, recibió varios halagos por parte de la gente que se encontraba viviendo en esos lugares, hasta que pudo ver una silueta muy conocida para él. Parada en unos de los tejados de las casas, se encontraba Aiz que estaba aplaudiendo mientras lo miraba fijamente con una leve sonrisa y este se la devolvió.

Después de un minuto se acordó que había sido abrazado fuertemente por su Kami-sama y que esta aun no lo había soltado. Bell se sonrojo levemente y decidió partir lo más rápido posible a su dormitorio temporal junto con su Diosa, por lo que la agarro nuevamente en estilo nupcial y salió del lugar lo más rápido que pudo dejando una estela blanca para los civiles, ya que Aiz vio muy bien para donde se dirigía.

Después de ese día, los civiles que lograron ver la Azaña que hizo el chico y lo rápido que se movió, lo empezaron a llamar "el Destello Blanco de la familia Freya"

Cuando por fin Bell logro llegar a Babel, subió hasta el piso más alto y entro a la habitación junto con Freya. La soltó delicadamente y se dispuso a irse. Pero antes de hacerlo, Freya le llamo la atención.

Freya: (sonriendo radiantemente) para donde te diriges ahora Bell-kun?

Bell: (abriendo la puerta del dormitorio): bueno, como podrá ver estoy todo manchado de sangre y tengo las ropas hechas un desastre, asique me voy a bañar y buscarme algo de ropa para cambiarme.

Freya: (risita) perdona, me había olvidado de esos detalles.

Bell: no hay problema Kami-sama, ahora si me disculpa (hace una reverencia y se va).

Freya: (sonrisa maliciosa) quien diría que lograría romper aún más mis expectativas, esto es increíble.

(Se sienta en la cama) me pregunto hasta cuan fuerte se puede lograr hacer mi Bell-kun. Gracias a él, estoy segura que nuestra familia se alejara aún mucho más en temas de poder, quien sabe, quizás sea capaz de superar a Ottar en poco tiempo.

Después de pensar en esas cosas, Freya se detiene un momento a recordar todo lo sucedido ese dia. Como Bell la salvo, como la protegió y los más importante, aquellas palabras que le dijo que hicieron que ella se sintiera verdaderamente querida por primera vez en su larga vida, ya que ni los mismos dioses querían protegerla o estar cerca de ella sin que sea por el manejo de la lujuria.

Si Freya se hubiera visto a sí misma, se hubiera quedado impresionada, ya que por primera vez, la Diosa de la Belleza tenía una sonrisa genuina en su rostro. No eran como las otras sonrisas falsas que eran para aparentar o sus sonrisas maliciosas, sádicas o pervertidas que daba cuando sentía que sus planes iban acorde o incluso mejor de lo que esperaba. Además, sin contar el rubor que tenía en su cara.

Después de divagar en esos recuerdos, ella recordó que Bell menciono que se hiba a bañar.

También recordó que ella misma menciono en su mente que el merecería una recompensa después de esto.